El Gobierno recurrirá ante el TS la nacionalidad concedida a una niña nacida en tránsito migratorio

La madre de A. estaba feliz tras años de lucha. Declaraba que había dormido durante siete años con los ojos despiertos, por si a su hija le pasaba algo. La Audiencia Provincial de Guipúzcoa calmó esta semana su ansiedad y concedió la nacionalidad española a la pequeña que había nacido, en el viaje en patera de Camerún a España, durante el llamado 'tránsito migratorio', en la ciudad marroquí de Agadir. Pero a la madre pueden arrebatarle el sueño de nuievo, porque la Dirección General de Seguridad Jurídica y Fe Pública, inscrita en el Ministerio de Justicia, habría dado la orden a la Abogacía del Estado de presentar un recurso de casación ante el Tribunal Supremo para tratar de revocar la sentencia dictada en Guipúzcoa. El plazo para la presentación del recurso vence la semana próxima.

Lo que había conseguido la madre, según el expresidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco y doctor en Derecho, Juan Luis Ibarra , podía abrir la puerta a modificar el Código Civil para que los niños nacidos en las mismas condiciones dejen de ser niños apátridas.

La menor, residente con su madre en San Sebastián , pese a haber nacido en Marruecos, no estaba inscrita en ningún registro ni tiene pasaporte, por lo que no podía ser dada de alta en el padrón de la capital guipuzcoana ni acceder a servicios sanitarios o educativos.

La niña entró en España por Tarifa en patera como apátrida con su familia el 8 de mayo de 2018 y la madre se instaló inicialmente en la localidad cordobesa de Montilla y, gracias a la mediación de Cáritas, se trasladó a Donostia. Camerún, Marruecos y España no accedieron a registrar el nacimiento de la niña.

Según fuentes judiciales y ha adelantado eldiario.es, el Estado va a seguir pleiteando en contra de la decisión de la Audiencia Provincial, con justificaciones formales asentadas en los acuerdos bilaterales con Camerún por los que la niña tendría esa nacionalidad. Sería camerunesa por ser descendiente de su madre, camerunesa. Sin embargo, el argumento de fondo podría ser que el Gobierno teme el efecto llamada de los progenitores cuyos hijos nacen en tránsito. Los abogados consultados por ABC ya adelantaron que preveían un recurso por el «buenismo» de la sentencia pionera dictada en Guipúzcoa.