Jeanne y el chico formidable

Jeanne es una atractiva joven que vive la vida deprisa y a la que no le faltan novios. Cuando conoce a Olivier, un joven seropositivo, comprende que es la persona que ella siempre ha estado buscando. Cuando Olivier se entera de que le queda poco tiempo de vida, prefiere alejarse de Jeanne, aunque esto suponga dejarla sola.

Los realizadores franceses Olivier Ducastel y Jacques Martineau se propusieron en su debut como directores mostrar la verdadera naturaleza de la terrible enfermedad del SIDA. Cuando se pusieron a trabajar en el proyecto les surgió la idea de convertir el guión en un musical que, a pesar de su fondo trágico, tuviera un tono alegre. El resultado es este musical atípico que refleja el sufrimiento y la impotencia que provoca el ver como se funde la vida del ser amado. La historia del cine está repleta de historias de amor truncadas por la enfermedad terminal de uno de los integrantes. Títulos como “Love Story” o “Elegir un amor” se han convertido en auténticos clásicos del género. En los años 90 la enfermedad del SIDA pasa a protagonizar este tipo de películas, siendo la más representativa “Philadelphia”.