ANÁLISIS

Asimetría en el centro

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Finalizada la primera fase, ha sido Francia, como segundo de Grupo G, la selección que nos ha tocado en octavos. Es un combinado con mucha experiencia ya que la mayoría de los jugadores han sido campeones del Mundo. Además, es un equipo al que en cinco duelos oficiales nunca hemos ganado.

Este grupo, el más veterano del Mundial, ha tenido un problema en los dos primeros partidos.

Domenech apostó por un hombre como Henry solo en ataque, pero no le dio buenos resultados. Para que venciese ha tenido que pasar que no jugase Zidane, sancionado por dos tarjetas, y que junto a Henry estuviese Trezeguet, complemento adecuado al delantero del Arsenal por ser un hombre de área que olfatea el gol y casi siempre lo materializa.

Ahora con la vuelta del madridista al 'once', Domenech deberá elegir si continúa el ariete de la 'Juve' arriba con Henry o no. La entrada de ambos con Zidane por detrás obliga a tener un medio campo asimétrico si no se juega en rombo. Y es que la proyección de los dos pivotes de recuperación (Makelele y Viera) y al jugar Zidane centrado, obliga al cuarto jugador del centro a decantarse por un lado u otro ya sea Ribery, Malouda o Wiltord.

Por tanto, la banda contraria queda un tanto desocupada y como los laterales no son excesivamente ofensivos (quizá algo Sagnol) ésta es la preocupación y la duda de Domenech, un entrenador al que le gusta la simetría. Por tanto, tendrá que resolver esta incertidumbre, aunque para los aficionados franceses no hay debate: Trezeguet tiene que estar con Henry para que el equipo sea más ofensivo.

Este problema podría superarlo el técnico galo si al 'gunner' le hace caer a la izquierda, zona donde se mueve con mucha soltura. Entonces, Sergio Ramos deberá de controlar sus subidas porque el del Arsenal es muy peligroso con espacios, y con el balón controlado maniobra muy bien. Pero eso también conlleva que su posición estaría alejada del área, donde Domenech piensa que Henry es muy valioso. Y además no quiere que se desgaste en el trabajo defensivo.

Por lo demás, Francia tiene una defensa muy experimentada, y con Barthez en la portería, sólo ha recibido un gol. Son férreos marcadores y buenos centrales, pero la velocidad de Torres les puede hacer mucho daño si tiene espacios y Francia adelanta sus líneas.

Mientras, el manejo del juego es misión de Zinedine Zidane, que se encarga de administrar balones a Henry (y Trezeguet si juega) para superar a la defensa. Es por eso que nuestra selección, la que más posesión ha tenido en el campeonato, no debe perder el balón, porque si lo hace y llega a Zidane hay que trabajar mucho para cortarles la conexión con los hombres de arriba.

Ribery es un jugador de movilidad por ambos lados. Es muy explosivo y da un gran impulso ofensivo al equipo. Luego dispone de Henry y Zidane como especialistas en faltas.

En córners, los centrales y varios mediocampistas se agregan al ataque quedándose Makelele atrás y, aunque no le han hecho muchos goles, será un filón a explotar por España.

De todas formas, aunque Francia no tiene gran ritmo, habrá que controlarla para evitar su calidad.