El médico Eufemiano Fuentes, uno de los cuatro detenidos por la Guardia Civil. / EFE
tras declarar ante el juez

En libertad con cargos los cuatro detenidos por el reciente caso de dopaje en el ciclismo

La medida cautelar dictada por el juez de guardia determina que los procesados tienen que acudir una vez por semana al juzgado

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El juez de guardia ha decretado como medida cautelar dejar en libertad a los cuatro implicados en la operación antidopaje, con la obligación de presentarse en el juzgado cada semana.

La Guardia Civil ponía esta mañana a disposición del Juzgado de Guardia de Plaza de Castilla al médico Eufeniano Fuentes, al hematólogo José Luis Merino, al corredor profesional de mountain-bike Alberto León y al director deportivo adjunto del Comunidad Valenciana, José Ignacio Labarta, detenidos el pasado martes en el marco de la operación contra el dopaje en el ciclismo, tras prestar declaración ante el instituto armado. Los detenidos empezarán a declarar ante el juez por un presunto delito contra la Salud Pública a lo largo de la mañana.

Según fuentes jurídicas, el juzgado no adoptará previsiblemente una resolución hasta esta tarde, cuando decida sobre la situación personal de los cuatro arrestados y las medidas cautelares que considera necesario imponerles. Pese a que corresponde a este Juzgado tomarles declaración, el Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid instruye las diligencias de la causa, que está bajo secreto de sumario.

El director deportivo Manolo Sáiz, también detenido en la misma operación, fue puesto en libertad 24 horas después de ser detenido, ya que podría ser un "cliente" de la red de "autotransfusiones" y no uno de sus responsables. En hecho de que en el momento de su detención portara 60.000 euros en metálico hace sospechar que las bolsas con la sangre tratada ilegalmente icautadas tuviesen por destino a corredores del Giro de Italia, competición que se inició el pasado 6 de mayo. Los investigadores sospechan que Sáiz iba a cerrar un trato con Fuentes y Merino y que sus detenciones lo impidieron.

Labarta podría desempeñar también un papel similar al de Sáiz en la trama. Ambos realizaban presuntamente las gestiones para que sus corredores pudieran beneficiarse de la sangre tratada para ganar en hematocritos y mejorar su rendimiento en plena competición.

Beneficio de la trama

Sin embargo, los detenidos que supuestamente se enriquecían con la trama son los médicos Fuentes y el hematólogo Merino Bartres. Los cuatro registros practicados en Madrid por los agentes de la UCO corresponden a dos pisos en Madrid de Fuentes, el domicilio de Merino Batres y el laboratorio con el que se relaciona a éste.

En uno de los apartamentos de Merino Batres se hallaron un millar de dosis de anabolizantes, esteroides, hormonas del crecimiento y un centenar de las casi 200 bolsas de sangre incautadas. El resto fueron incautadas en los dos pisos de Fuentes, donde eran guardadas en neveras, y donde también se encontraron los instrumentos necesarios para la "autotransfusión", tales como criogenizadoras y centrifugadoras. Esos pisos eran dedicados exclusivamente a estas tareas y allí no vivía nadie.

Por último, el ex corredor profesional León se dedicaba presuntamente al transporte de las sustancias dopantes y de la sangre tratada. Su domicilio fue registrado el día 23 en San Lorenzo de El Escorial (Madrid), al igual que el de Labarta, situado en Zaragoza.