Olmert se consolida como relevo de Sharon con menos dificultades de las esperadas

El primer ministro israelí en funciones, Ehud Olmert, consolida su posición al frente del partido Kadima y del Gobierno hebreo con menos dificultades de las que se pronosticaron cuando Ariel Sharon sufrió un infarto cerebral el pasado miércoles. En las últimas horas, Olmert -que presidió ayer su primera reunión semanal del Gabinete Nacional- ha recibido el apoyo de un gran número de dirigentes de la nueva formación que consideran que es la persona adecuada para suceder al líder, que se debate entre la vida y la muerte en un hospital de Jerusalén, fundamentándose en que entre ambos había una gran sintonía política y una coincidencia de objetivos.

A ello hay que añadir que el presidente de EE UU, George W. Bush, también cree que Olmert es la persona adecuada para conducir a Israel en estos momentos difíciles sin dejar de lado el proceso de paz, con el que el sustituto provisional de Sharon está comprometido.

«El presidente Bush preferiría que Ehud Olmert fuera el primer ministro porque es el único de los candidatos que está comprometido con el legado de Sharon y con el progreso de la Hoja de Ruta», dijeron fuentes de la Casa Blanca. Algunos analistas creen que la Administración Bush invitará a Olmert a Washington incluso antes de las elecciones hebreas del 28 de marzo para darle su espaldarazo.

Dentro del territorio israelí, el ex dirigente laborista Simon Peres expresó ayer de manera ceremoniosa su apoyo a Olmert después de haber recibido un sinfín de críticas de los dirigentes de Kadima que le acusaron, una vez más, de conspirar para manipular al jefe del Gobierno en funciones.

Los dirigentes de Kadima estaban disgustados con la actitud de Peres, quien el viernes se reunió con Olmert pero que hasta ahora ha declinado decir si se va a afiliar al partido creado por Sharon y parece estar jugando con la enfermedad del dirigente conservador para sacar tajada colocando por encima de todo sus aspiraciones personales.

Cuando un periodista le preguntó si iba a ir en la lista de Kadima, Peres respondió: «Es casi seguro que sí», y cuando le cuestionó si Olmert iba a encabezar la lista del partido, el político ex laborista contestó, «por supuesto que sí».

Casi seguro que sí da a entender, según los analistas, que Peres aspira a obtener garantías de que ocupará un puesto destacado en la lista de Kadima y que después desempeñará un cargo significativo que debería estar relacionado con el proceso de paz y con las negociaciones con los palestinos.

Rumores interesados

El veterano político está dejando circular rumores que indican que tras la incapacitación de Sharon estaría interesado en volver al Partido Laborista siempre que se le permitiera concurrir a las próximas elecciones como número uno.

Otro político que ha echado flores a Olmert es el laborista Ehud Barak. «Es un digno sustituto de Sharon. No tiene el áurea guerrera de éste, pero es una persona muy inteligente que posee mucha experiencia y que ha sido responsable de numerosos ministerios», dijo el ex primer ministro.

Está previsto que Olmert reciba a Barak en las próximas horas y que los dos aborden distintas cuestiones relacionadas con el futuro de Israel. No se sabe si habrá una invitación para que se sume a Kadima, algo que podría ocurrir puesto que Barak no se siente cómodo con el nuevo líder laborista, Amir Peretz.

Olmert además ya ha arreglado cuentas con la ministra de Justicia, Tzipi Livni, una política muy ambiciosa y cercana a Sharon que se veía como heredera del hospitalizado jefe de Gobierno. Livni ha renunciado a competir por el puesto de Olmert y según algunas fuentes próximas a la ministra, el sustituto de Sharon en funciones le ha correspondido ofreciéndole una cartera importante en el próximo Ejecutivo, muy probablemente la de Exteriores.