Ahmed Chelh y Antonio Díaz, sospechosos del crimen de la menor de Algete y de cuatro raptos a niñas
Ahmed Chelh y Antonio Díaz, sospechosos del crimen de la menor de Algete y de cuatro raptos a niñas - ángel de antonio/ABC
Sucesos

El pederasta y el supuesto asesino de Eva Blanco, acorralados por el haplotipo STR-Y

El cromosoma Y que se transmite por vía paterna es la pieza clave de cargo contra ambos criminales. Su precisión en absoluta

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Caso cerrado. El ADN nuclear del presunto asesino de Eva Blanco es idéntico al hallado en el cuerpo y en la ropa interior de la menor de Algete, encontrada cosida a cuchilladas en una cuneta el 20 de abril de 1997, después de haber sido agredida sexualmente. Su propietario es Ahmed Chelh Gerj, de 52 años, nacionalizado español por matrimonio, de origen magrebí.

Así lo han determinado los análisis realizados en el laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil. El informe con los resultados fue enviado ayer a la titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Torrejón de Ardoz, que instruye la causa que da prácticamente por cerrada.

Tanto en este atroz suceso, como en los realizados por el supuesto pederasta de Ciudad Lineal, Antonio Ortiz, el haplotipo STR-Y (variaciones del ADN que se transmiten por vía paterna), han sido determinantes para que ambos fueran cazados por la policía.

En Ortiz, dicho cromosoma Y, además de otros vestigios biológicos, apareció en tres ocasiones: en la pequeña española raptada en el parque de San Juan Bautista el 10 de abril de 2014; en la menor china de Ascao a la que subió a su coche engañada el 17 de junio y en el último secuestro que perpetró, cuya víctima fue una cría dominicana, el 22 de agosto en Canillas. En su caso no hubo que esperar tanto tiempo ni cotejarlo con ningún otro varón: dio positivo y él solo tiene una hermana.

Ninguno de los presuntos criminales ha confesado los hechos que les atribuyen. No hace falta, el ADN ha hablado por ellos: no hay mayor carga probatoria que esa. A Ortiz le imputan la agresión sexual y el rapto de cuatro menores. A Ahmed, asesinato, agresión sexual y detención ilegal. El viernes en sede judicial se le tomaron las muestras tras ser extraditado.

Actitud errática

La X que faltaba por despejar se ha desvelado, tal y como se preveía, tras la eficaz labor del Instituto Armado. Para ello, han sido determinantes los avances en genética forense que hicieron posible que la Universidad de Santiago concluyera en octubre de 2013 que el sospechoso era norteafricano. Esta pista crucial dio un vuelco a la investigación y condujo a los agentes hasta uno de los hermanos menores del sospechoso en junio pasado. A finales de agosto se supo que no era el dueño de ese material biológico, pero su gran similitud no dejaba lugar a dudas.

Descartado el otro varón de la familia, era Ahmed, quien huyó dos años después de crimen de Blanco a Francia, donde fue detenido el 1 de octubre, a falta de año y medio para que prescribiera el caso. No lo esperaba y la errática actitud que ha mantenido lo demuestra. «Estuve con ella esa noche, dos sujetos me obligaron a masturbarme sobre ella», explicó al fiscal francés, para justificar los restos de semen encontrados en el cadáver y concluir diciendo que «quiere cumplir condena en España». Se creía impune. Autor del «crimen perfecto».

Ver los comentarios