La guerrilla kurda del PKK mata a 12 soldados turcos

Al menos 12 soldados turcos han muerto en las últimas horas en atentados y enfrentamientos con la guerrilla kurda del PKK en diferentes puntos del país. Ocho de ellos murieron al estallar una mina al paso de un convoy militar en Siirt, en el sureste del país, que también provocó varios heridos más. Los otros cuatro fallecieron como consecuencia de las heridas recibidas la noche del martes en un combate con militantes kurdos en la región de Diyarbakir.

Este martes, además, un agente de policía resultó herido en un ataque guerrillero contra una comisaría de policía en el distrito de Baglar, también en Diyarbakir. En Estambul, un miembro de las YDG-H (la rama juvenil del PKK) murió en un tiroteo con la policía antiterrorista, que trataba de detener a los participantes en una protesta ilegal.

Se trata de la jornada más sangrienta desde que el mes pasado las negociaciones de paz entre el PKK y el Estado turco colapsasen. Desde entonces, más de medio centenar de miembros de las fuerzas de seguridad han muerto y casi doscientos han resultado heridos en la campaña militar lanzada por la guerrilla, que ha provocado niveles de violencia similares a los de los agitados años 90.

Las autoridades turcas, de hecho, han decretado un toque de queda en varias provincias del sureste del país. El PKK ha impuesto controles de carretera en las áreas de Tunceli, donde ha declarado el establecimiento de una «región autónoma» fuera del control del estado, y en Erzurum, donde hace dos días abatió a un conductor de autobús que intentó saltarse la barrera.

Estambul se ha visto además sacudido hoy por otro intento de atentado: un tiroteo con armas automáticas contra los guardias del Palacio de Dolmabahçe, que afortunadamente se ha saldado sin víctimas. Los dos atacantes han sido detenidos, y se cree que podrían ser militantes del grupo de extrema izquierda DHKP-C, otra de las organizaciones castigadas por la «campaña antiterrorista general» lanzada por el gobierno turco en el último mes.

En mitad de esta situación, toma posesión el nuevo Jefe del Estado Mayor, el General Hulusi Akar, que este martes asumió el mando de las Fuerzas Armadas. «Los acontecimientos en el mundo, la inestabilidad en nuestra región, junto con las incertidumbres y los conflictos, y las acciones de organizaciones terroristas en nuestro país, especialmente los terroristas separatistas del PKK, han llevado a un incremento de las necesidades de seguridad», declaró Akar durante su toma de posesión.