El populista Donald Trump desestabiliza las primarias republicanas

El millonario Donald Trump saldrá esta noche ante las cámaras, en el primer debate televisado entre los candidatos de las primarias republicanas para la Casa Blanca, con el firme propósito de continuar siendo el gran protagonista de la campaña; los otros nueve lo harán con la no menos firme intención de evitar que el torbellino Trump -sus afirmaciones simplistas y polémicas, dichas con aparente gran convicción- los engulla.

Fox emitirá esta noche el primero de una serie de debates republicanos que prometen ser de todo menos esclarecedores: con diez candidatos en el estrado a cada uno le corresponderá en realidad muy poco tiempo de intervención, sin muchas posibilidades de réplicas y contrarréplicas. Podía haber sido peor, pues hay 17 candidatos oficiales para las primarias que se desarrollarán a partir de enero de 2016.

Para el debate, Fox ha escogido a los diez que van primeros en las encuestas.

A partir de la media de varias encuestas nacionales, Fox ha incluido, por este orden, al magnate inmobiliario Donald Trump; al exgobernador de Florida Jeb Bush; al gobernador de Wisconsin, Scott Walker; al exgobernador de Arkansas Mike Huckabee; al neurocirujano Ben Carson; a los senadores Ted Cruz (Texas), Marco Rubio (Florida) y Rand Paul (Kentucky), y a los gobernadores Chris Christie (Nueva Jersey) y John Kasich (Ohio).

La selección no ha estado exenta de polémica, dada la distancia apenas decimal que existe entre varios de los aspirantes. Así, ha metido a Kasich, de candidatura reciente y que en varios sondeos iba por detrás, y ha dejado fuera a Rick Perry, exgobernador de Texas y candidato ya en 2012. Los siete excluidos participarán en un «foro», que también emitirá Fox, por la tarde, en una franja horaria de menor audiencia.

Los excluidos

La ausencia de Perry restará probablemente vivacidad al debate, pues ha sido el candidato que más frontalmente se ha enfrentado al populista Trump, quizás como intento para subir algo en las encuestas. Los otros adversarios, si bien en ocasiones se han desmarcado con diferente fuerza de las afirmaciones de Trump, como sus ataques contra la inmigración mexicana, han preferido no enzarzarse demasiado con quien está siendo la sorpresa de la carrera presidencial republicana.

Además de Perry también queda fuera del debate otro de los candidatos de 2012, el exsenador por Pensilvania Rick Santorum. Los otros no incluidos son el gobernador de Luisiana, Bobby Jindal; el senador Lindsey Graham (Carolina del Sur); la exejecutiva de Hewlett Packard Carly Fiorina, así como los exgobernadores George Pataki (Nueva York) y Jim Gilmore (Virginia).

Tras el de Fox otras cadenas estadounidenses emitirán otros debates, tanto entre los candidatos republicanos como entre los demócratas, en los meses que quedan hasta diciembre. En enero arrancará el periodo de primarias con las citas primero de Iowa y luego de New Hampshire, seguidas por las del resto de los estados. Ambos partidos celebrarán sus convenciones para proclamar sus candidatos en verano de 2016, y las presidenciales tendrán lugar en noviembre de ese mismo año.