La revista «Oggi» confirma el romance entre Carlota Casiraghi y el director de cine Lamberto Sanfelice

Era el pasado mes de junio cuando la revista «Voici» se hacía eco de la ruptura entre Carlota Casiraghi y el cómico Gad Elmaleh. Después de cinco años de relación y el nacimiento de su hijo Raphaël, se confirmaba lo que ya decían los mentideros aristocráticos de Mónaco y París.

Pero si alguien dudaba sobre esa ruptura, esta semana la revista italiana «Oggi» ha publicado en portada una imagen donde la hija de Carolina de Mónaco aparece dándole un apasionado beso a su nuevo compañero, el director de cine italiano Lamberto Sanfelice. El reportaje fotográfico no solo se basa en una secuencia de besos y abrazos, la pareja también aparece dando un paseo por París, donde Casiraghi acaba de comprarse una casa.

Aunque estas no son las primeras imágenes de la pareja, sí son las que confirman el idilio. La revista «Voici» publicó a principios de noviembre otras instantáneas donde aparecían ellos dos, pero esta vez sin interactuar.

Desde el pasado mes de octubre, la princesa ha ganado en independencia y ha intentado dar un giro a su vida. A caballo entre París y el Principado, ha inaugurado unos cursos filosóficos sobre amor en Mónaco.

Sin embargo, pese a que ya vivían separados, Casiraghi y Elmaleh han intentado durante los últimos meses acabar con los rumores dejándose ver en acontecimientos sociales como el Longines Athina Onassis Horse Show, en Saint-Tropez. También en la boda de Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo. Después de que les disparasen un par de fotos, los dos volvían a hacer vidas por separado. Lo que sí es cierto es que la nieta de Grace Kelly y el cómico mantienen una buena relación por el bien del pequeño Raphaël. De hecho, la semana pasada se pudo ver al actor solo empujando el cochecito de su hijo.

Respecto a su «nuevo amor italiano» -así lo llama «Oggi»-, se puede decir que tiene 40 años y desciende de una familia de banqueros. Y, aunque no es demasiado conocido profesionalmente, la prensa italiana le augura un gran futuro.

Lo único que se puede asegurar con este romance es que otro artista está a punto de llegar a la familia Grimaldi.