Fachada del Hotel Villa Magna de Madrid
Fachada del Hotel Villa Magna de Madrid - ABC
Inmobiliario

Un grupo turco compra el Hotel Villa Magna

Dogus Holding, que tiene seis cinco estrellas en Turquía, aterriza en la capital con una operación que podría haber costado 180 millones de euros

MADRID Actualizado: Guardar
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El grupo turco Dogus Holding acaba de aterrizar en el mercado hotelero madrileño con la adquisición del Hotel Villa Magna, unos de los pocos grandes cinco estrellas que quedaban por cambiar de manos en la capital. La operación, según fuentes del sector inmobiliario, se ha llevado a cabo con el máximo «secretismo» y pone fin al deseo de sus propietarios, la familia portuguesa Queiroz Pereira, de deshacerse de este inmueble.

Dogus Holding, compañía presidida por el magnate Ferit Sahenk, tiene más de 200 empresas relacionadas con la construcción, el sector inmobiliario, los servicios, el entretenimiento y los hoteles. En Turquía regentan seis establecimiento de cinco estrellas al que suman ahora el emblemático Villa Magna. Según ha avanzado El Confidencial, la operación podría haberse cerrado «en torno a los 180 millones de euros».

No obstante, desde Jones Lang Lasalle (JLL) afirman que el precio no va a trascender oficialmente. «El precio es secreto», han informado a ABC desde la consultora inmobiliaria que tenía el encargo de la venta.

El hotel llevaba meses con el cartel de «se vende». Como ya informó este diario en septiembre de 2015 Jaime Gilinski, primer accionista del Banco de Sabadell y una de las mayores fortunas del mundo, estuvo a punto de cerrar una operación por un precio similar. Esa es la cantidad que los propietarios del establecimiento de lujo, el grupo portugués Sodim han venido pidiendo tras haber invertido una gran cantidad de dinero en reformar íntegramente el Villa Magna en 2007.

Esta compra se enmarca dentro del auge de la adquisición de hoteles de lujo en la capital, tras años de decadencia en el sector. La tendencia comenzó en 2014 con el Hotel Intercontinental. Sus 302 habitaciones fueron adquiridas por el grupo catarí Katara Hospitality, por un importe superior a los 60 millones. Fue el único hotel singular vendido ese año y marcó el inicio del cambio de tendencia. En 2015 fue otro de los grandes, el centenario Hotel Ritz, el que fue comprado por la firma de lujo Mandarin Oriental y el grupo familiar árabe Olaya. Desembolsaron unos 130 millones, a los que hay que sumar otros 90 para reformarlo. Por último, en noviembre, el Hotel Palace también cambió de manos tras la operación de fusión entre el grupo Marriot y Starwood, antigua propietaria del establecimiento.

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