El joven agredido por un portero de discoteca en Murcia sale del coma

Por fin una mejoría. El nuevo año ha traído buenas noticias para Andrés Martínez, el joven de Alcantarilla que recibió un brutal puñetazo por parte del portero de un bar de copas de la capital. El chico, de 28 años, que está ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Virgen de la Arrixaca desde el 11 de diciembre, ha salido del coma, según confirmó su hermana, Virginia, al diario 'La Verdad'.

Pese a este avance, según precisaron fuentes sanitarios, Andrés sigue ingresado en la UCI. Su estado aún es grave, aunque se encuentra estable y consciente. Los médicos, al parecer, le han realizado una traqueotomía por lo que no puede hablar, aunque sí ha conseguido comunicarse con su familia.

«Ha estado en un riesgo muy elevado. Hace un par de días salió del coma y reconoce ya a la agente aunque aún no puede hablar. Los médicos están contentos de la evolución pero dicen que hay que ir día a día», ha señalado su tío Fulgencio esta mañana en el programa «Herrera en Cope». «Hemos recibido mucho apoyo. Está volcada toda Murcia, nos llaman hasta del extranjero», ha dicho en referencia a la fuerte solidaridad que ha despertado la historia de su sobrino.

Andrés ingresó en la UCI de La Arrixaca en la tarde del domingo 11 de diciembre tras recibir el puñetazo del portero de un local en la plaza de Santa Isabel, en Murcia. Un golpe brutal y certero que quedó reflejado en el vídeo grabado por una testigo con un teléfono móvil y que conmocionó a la Región. Andrés Martínez había salido ese día con un grupo de amigos a celebrar el cumpleaños de uno de ellos y visitó algunos bares de copas del entorno de la plaza de las Flores, concretamente el local 609.

Según sostiene la juez que instruye el caso, a tenor de las declaraciones prestadas hasta el momento, parece que Andrés y un amigo fueron recriminados por los guardas del bar, debido a su comportamiento, y que les instaron a abandonar el local. Una vez fuera, y tras protestar porque les negaran la entrada, se marcharon del negocio, siendo seguidos por dos de los vigilantes, el argelino Djamal A. y el español Julio F., hasta la plaza Santa Isabel.

Allí se les sumó Hristo I. K., el autor de la agresión, que trabajaba en un local del Grupo Temporáneo -el mismo que el 609-. Este, de forma totalmente sorpresiva, le propinó a Andrés un puñetazo que lo hizo desplomarse en el suelo y golpearse la cabeza. Tras el golpe, según quedó reflejado en el vídeo, los tres vigilantes se marcharon del lugar sin preocuparse por el estado de Andrés.

Hristo I. permanece en el centro penitenciario de Sangonera la Verde, donde ingresó, dos días después de la agresión, tras declarar ante la titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Murcia. Sostuvo que su agresión no fue «intencionada, ni premeditada» y que no fue consciente de la gravedad de la misma.

Según explicó en su declaración, a la que ha tenido acceso 'La Verdad', «vi que (la víctima) se metía las manos en los bolsillos y pensé que iba a sacar algo, así que le golpeé con el antebrazo, aunque no recuerdo dónde le di». Después, aseguró, se fue solo del lugar porque «me asusté».