El homicida de Abadiano fingió un asalto con incendio a su taller como coartada

El hombre de 55 años que ayer asesinó violentamente a su mujer y a su suegra en Abadiano (Vizcaya) fingió haber sufrido un asalto con incendio a su taller de carpintería en una coartada esperpéntica que él mismo desmontó durante el interrogatorio con la Ertzaintza. Tras confesarse autor del doble homicidio, el agresor reconoció también haber fingido un ataque en su empresa de carpintería. Dos de sus empleados le encontraron sobre las 8 de la mañana maniatado, colgando boca abajo de un montacargas, y con diversas contusiones. Fueron ellos quienes le liberaron y le sacaron de la nave, a la que él mismo había prendido fuego.

La Ertzaintza apunta al móvil económico como detonante del doble crimen machista que ha conmocionado a la localidad de Abadiano.

Según los investigadores, el hombre habría mantenido una fuerte discusión familiar y acabó matando a golpes a su mujer y a su suegra. Esta última, de unos 80 años, acababa de llegar de Galicia para pasar la Navidad con su hija. La pareja tenía un hijo.

El arrestado y autor confeso del crimen pasará en las próximas horas a disposición judicial como responsable de un doble delito de homicidio.

«En estado de shock»

La mujer del homicida acababa de prejubilarse tras 41 años trabajando en la empresa Inyectametal de Abadiano, donde esta mañana ha tenido lugar una concentración en repulsa del terrible suceso. «La empresa está en estado de shock. Ha sido una grandísima compañera y bellísima persona, siempre dispuesta a todo. La gente está que no digiere la noticia», se lamentaba un portavoz este mediodía.

El ayuntamiento de Abadiano ha decretado dos días de luto oficial y ha colocado sus banderas a media asta en señal de duelo. Mañana se celebrará una tercera concentración de condena. El Parlamento vasco también ha guardado un minuto de silencio para condenar el doble crimen.