La cara oculta de los asalariados de Just Eat: 447 euros por 80 horas al mes

¿Asalariados o autónomos? El modelo laboral de los «riders», los repartidores que operan co n plataformas de reparto a domicilio, lleva siendo cuestión de debate desde hace años. Una discusión que enfrenta a las empresas, trabajadores y sindicatos y que parecía encontrar solución hace unas semanas cuando el Tribunal Supremo dictaminó que debían ser asalariados . Sin embargo, la regulación de estos repartidores que negocia el Gobierno con los agentes sociales no deja zanjado el conflicto. Glovo, Deliveroo, Uber Eats junto con la patronal Adigital y cientos de repartidores continúan luchando para ser considerados trabajadores por cuenta propia. Pero no todas las empresas defienden este modelo laboral.

En el otro lado se encuentra Just Eat, que lleva años asegurándose de que los repartidores que operan desde su plataforma estuvieran dados de alta por la Seguridad Social por los propios restaurantes o por la compañía con la que tenía externalizados los contratos, el grupo sevillano Mox, especializado en «repartos de última milla». Además, esta misma semana Just Eat anunció que crearía su propia flota de repartidores con contrato para apostar por «el empleo seguro y de calidad».

Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Según uno de los contratos que ha podido visualizar ABC, el grupo Mox, que también da servicios a Glovo y Uber Eats, ofrecía de base un sueldo bruto de 447 euros al mes por 20 horas semanales en una jornada parcial en Sevilla. A ello se une que si el repartidor cuenta con moto propia le abonarán un incentivo de 60 euros netos más 0,2 euros por pedido realizado, mientras que las horas extras se pagan a 5 euros. Además, se necesita disponibilidad para trabajar durante todos los días de la semana. Otra oferta para Barcelona ofrecía las mismas condiciones por 556,5 euros brutos y 6 euros cada hora extra.

Sobre los repartidores propios que Just Eat pretende reclutar, desde la compañía no han especificado a este diario el número de repartidores que contratarán, y aseguran que «dependerá de la demanda cambiante». Eso sí, según ha podido saber ABC a través de profesionales del sector, el 90% de los repartidores de la plataforma son contratados por los propios restaurantes, procediendo el 10% restante de terceros, así que no se descarta que sea ese porcentaje el pase a formar parte de la empresa. Sobre el salario, desde la plataforma aseguran a este periódico que «la intención de la compañía es pagar por encima del salario mínimo interprofesional.

Las asociaciones que defienden su condición de autónomos temen que la regulación que saque adelante Trabajo acabe mermando sus retribuciones salariales . Así, desde APRA aseguran que como autónomos tienen unos ingresos medios superiores a mil euros . Una cantidad que confían en incrementar si se les reconoce como colectivo, como en Francia, donde ya existe la figura del autónomo digital.

Desde otras asociaciones de repartidores como Asoriders aseguran sin embargo que sus condiciones están empeorando en los últimos meses por la agresiva « guerra de precios que están librando las plataformas». La organización ultima una encuesta entre sus asociados para conocer si desean convertirse en asalariados, una opción que hasta el momento habían rechazado tajantemente.