Ya se cuentan dos agresiones contra funcionarios en las oficinas de empleo en menos de 15 días
Ya se cuentan dos agresiones contra funcionarios en las oficinas de empleo en menos de 15 días - Luna revenga

CSIF exige Policía y detectores de metales en las oficinas de empleo tras otra agresión

El sindicato, con importante presencia en la Administración Pública, ha lanzado estas peticiones después de que una mujer haya sido agredida con arma blanca en Santa Cruz de Tenerife

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La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F), uno de los sindicato más representativo en la Administración Pública, ha reclamado este lunes a través de un comunicado al Ministerio de Empleo que garantice la presencia de miembros de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en todas las oficinas de empleo, así como arcos detectores de metales en las entardas .

CSIF ha lanzado estas peticiones después de que una mujer haya resultado herida con un arma blanca tras ser supuestamente agredida por otra en la puerta de una oficina de empleo en Santa Cruz de Tenerife. La herida es la hija de una de las directoras de la oficina, y la supuesta agresora es usuaria de la oficina de empleo.

Se trata de la segunda agresión brutal registrada en los últimos quince días, después de que el pasado 24 de marzo, un trabajador de la oficina de empleo de Calasparra (Murcia) fuera agredido con un bate de «baseball» por un usuario al que previamente se le había denegado la prestación.

Revisióin de los protocolos

CSIF ha exigido a la Administración que revise la aplicación del protocolo de agresiones y que lo dote con recursos que lo hagan efectivo frente a este tipo de situaciones, que fuentes sindicales, consideran que es «cada vez más frecuentes por la situación desesperación de muchas personas en situación de desempleo». Algo que avisan desde esta organización, trasladan a los funcionarios que les atienden.

Para este sindicato, los empleados públicos han sido objeto desde el inicio de la crisis de «una campaña de desprestigio sin precedentes, una operación de acoso y derribo». En opinión de CSIF, a los funcionarios se les está haciendo resposables de las causas de la recesión, «cuestionándose nuestra labor, el volumen de las plantillas e incluso nuestra función social».

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