Dopaje
Las variopintas excusas del dopaje: del vaso del abuelo al exceso de sexo
El inventario de justificaciones por un positivo incluye la lluvia, embarazos, sexo oral o errores del hospital
Kamila Valieva ha ingresado en el inventario de excusas del dopaje con una novedosa aportación. Según su madre y su abogada defensora, la niña prodigio de los Juegos Olímpicos de Invierno, bebió del vaso de su abuelo , quien por una de esas coincidencias de la vida, se trataba con trimetazidina. Un fármaco indicado para las anginas de pecho en segundo uso cuando falla la terapia con el medicamento de origen y que los especialistas consideran muy peligroso y totalmente contraindicado para una menor de edad. El catálogo de justificaciones en muy amplio y variado en la historia reciente del deporte.
La lluvia dio positivo. Fátima Yvelain dio positivo por EPO en una media maratón en Perpignan. Eritropoyetina, la meca del dopaje en los deportes de resistencia, producto estrella en los noventa, atajo para ganar resistencia y glóbulos rojos. Yvelain alegó que aquel día llovió mucho y que el agua habría arrastrado alguna sustancia que llegó a sus zapatillas, subió a sus calcetines y alcanzó a su organismo.
El complot de la CIA. Javier Sotomayor es el propietario del récord del mundo de salto de altura, aquellos 2,45 m. de Salamanca. El cubano dio positivo por cocaína en los 1999 y la excusa esgrimida fue que la CIA había contaminado su comida para perjudicar a Cuba.
El beso de Gasquet. El tenista francés achacó su positivo por cocaína a una noche de fiesta, en la que conoció a una chica en Miami, a la que besó y la que en teoría le contagió de la droga social.
Sexo oral. El atleta español Daniel Plaza fue oro olímpico en los Juegos de Barcelona, cumbre en su carrera manchada por un positivo de nandrolona. Plaza explicó ante las autoridades antidopaje que la noche anterior le había practicado sexo oral a su mujer y, que al estar embarazada, le contaminó con el anabolizante.
Un error del hospital. Mariano Puerta fue el rival de Rafa Nadal en su primera final en Roland Garros, 2005. El tenista argentino dio positivo por clembuterol y se explicó de la siguiente manera: fue un ataque de asma, un viaje a urgencias y error en la medicación del hospital.
Medicamentos para la suegra . Raimondas Rumsas terminó tercero en el Tour de Francia 2002 detrás de Armstrong y Beloki.Al terminar la carrera, la policía le detuvo en la frontera con un cargamento de EPO, hormonas de crecimiento y testosterona. «Son para mi suegra», dijo el ciclista en la comisaría.
Embarazo inexistente. Sesil Karatancheva fue una destacada tenista búlgara que en 2005 fue detectada como positivo por nandrolona. La chica, que tenía 16 años cuando sucedió, explicó que estaba embarazada. Al hacerse las pruebas, el resultado fue negativo.
Contaminación en la comida. Es uno de los argumentos más acostumbrados, sobre todo en el ciclismo. La contaminación de alguna sustancia prohibida por ingesta de alimentos. Alexi Grewal, Alberto Contador, Gilberto Simoni, Adrie van der Poel, el triatleta Graham O'Grady apelaron a este asidero.
Un accidente que no existió. Un positivo por omisión, sin rastro. Los atletas griegos Kostas Kenteris y Ekatherini Thanou, los mejores deportistas del país que iban a participar en los Juegos de Atenas 2004, no se presentaron un control obligatorio y explicaron que habían tenido un accidente de moto. El suceso no consta en ningún lugar.
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