Enrique Ponce: «Nací torero y siempre seré torero... hasta que Dios quiera»

Enrique Ponce, miembro del consejo ejecutivo de la Cátedra de Tauromaquia Germán Briceño Ferrigni de la Universidad de Los Andes, mostró su conocimiento del toreo y su maestría en el discurso que pronunció en el homenaje que le dedicaron la citada Cátedra de Tauromaquia y la Comisión Taurina Municipal. El acto se celebró en el Salón Cultural Cova rey de la Plaza de Toros de Román E. Sandia de Mérida (Venezuela).

El maestro hizo un alegato en defensa de la Fiesta, de la protección de las Escuelas taurinas y de los niños en los toros, con la exposición de su concepto y sentimiento del torero: «Nací torero y seré siempre torero... Hasta que Dios quiera». Dio una lección de tauromaquia y evidenció su cariño por Venezuela.

En el mismo acto se presentó la obra de Francisco Alfredo de Jongh titulada «Al Maestro Enrique Ponce en sus Bodas de Plata impregnadas de Arte», con prólogo de Juan Lamarca, dirigente del Círculo Taurino Amigos de la Dinastía Bienvenida.

Entre los asistentes destacaron los empresarios de Ramguertauro, Juan José Guerrero y Ricardo Ramírez; Juan Lamarca, el Arzobispo de Mérida, Monseñor Porras; Jorge Bustamante, presidente de la Comisión Municipal; Fortunato González, director de la Cátedra de Tauromaquia de la U.L.A. y César Alarcón, de Coremer.

Ponce también recibió el Botón de Huésped Distinguido por parte de la Cámara Municipal del Libertador de manos de su presidente, José Luis Vásquez.

La Cátedra de Tauromaquia Germán Briceño Ferrigini, adscrita a la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas de la Universidad de Los Andes dirigida por Fortunato González, y de la que es miembro el diestro de Chiva desde su fundación, le ha designado ahora como profesor visitante. Y, por último, el Complejo Recreacional de Mérida (Coremer) le hizo entrega de un reconocimiento institucional como regente de la Monumental de Mérida, de la mano del abogado César Alarcón.