CÁDIZ

El nuevo parón de la obra del puente deja en el aire su estreno para la víspera electoral

Dragados aprovecha el resquicio legal de una modificación técnica del proyecto para plantar a Fomento y reajustar el precio

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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La fecha de inauguración del nuevo puente de Cádiz está otra vez en el aire. La orden de Dragados de paralizar la obra a un año de su culminación, adelantada el miércoles por la tarde por lavozdigital.es, cogió ayer por sorpresa incluso al Ministerio de Fomento, que no esperaba que la empresa adjudicataria del proyecto aprovechara la redacción de un expediente de modificación técnica para ordenar la retirada de las subcontratas. Este nuevo revés impide por ahora fijar una fecha en el calendario para la inauguración del segundo acceso de la Bahía. La reprogramación que se hizo de la obra a primeros de año situó en el primer semestre de 2015 el ansiado estreno. Sin embargo, la definición de una fecha de apertura ha ido tomando cuerpo al mismo tiempo que han avanzado los tajos. Así, la terminación del nuevo puente estaba prevista para mayo, coincidiendo en el tiempo con las elecciones municipales. Esta previsión se antoja ahora difícil de cumplir tras el parón decretado hasta octubre.

El ritmo de trabajo era óptimo. La constructora y Fomento habían implantado tres turnos de trabajo para aprovechar las 24 horas del día, incluidos los fines de semana y los festivos. De hecho, el tramo atirantado, la fase más compleja, ya ha superado su ecuador y es perceptible la fisonomía del viaducto desde varios enclaves de la Bahía.

Revisión de costes

Dragados no ha tenido en cuenta el espectacular desarrollo de la obra a la hora de ordenar una nueva paralización, la tercera desde que comenzó en 2007. La decisión de la empresa es fruto de la redacción de un expediente de modificación del proyecto que afecta a varios tramos de la obra. La construcción del segundo puente ha pasado por varias etapas y toca ahora revisar algunos costes. Este es el caso de la reordenación de la glorieta de El Corte Inglés. Se trata de una modificación puntual del proyecto que se hizo sobre la marcha cuando la obra ya estaba iniciada. Como se recordará, los ingenieros de Fomento proyectaron la entrada del puente en el casco urbano de Cádiz a través de una rotonda aérea y con un paso soterrado para el tráfico de las avenidas de la Bahía y Las Cortes. Esta opción no gustó a los vecinos ni tampoco al Ayuntamiento, que forzaron un cambio en favor de un desembarco del tablero a cota cero y de una rotonda regulada por semáforos.

Otra de las modificaciones que recoge el expediente en curso fue la sustitución del tramo móvil por uno desmontable. El ingeniero Javier Manterola proyectó en su diseño inicial un puente con tramo móvil para favorecer así el paso de barcos de gran altura, pero esta opción también se cambió por una solución más económica y con menos costes de mantenimiento.

El expediente además se hace eco de algunas novedades del tramo atirantado, así como del hormigón utilizado y de distintos elementos de la ornamentación de la estructura. Fuentes de Fomento confirmaron ayer a LA VOZ que la elaboración de este expediente forma parte de un procedimiento legal para evaluar costes, aunque otra cosa bien distinta es que Dragados haya utilizado este resquicio para ordenar la paralización de la actividad hasta que se resuelve el expediente. Dragados, según adelantó el miércoles LA VOZ, ha ordenado el cese de la actividad en la totalidad de la obra hasta primeros de octubre, fecha en la que se prevé que estará aprobado el expediente. Fomento, por su parte, ha señalado que se encuentra al corriente de pago de las certificaciones de obra. No obstante, esta afirmación del Ministerio ha sembrado dudas en las filas del PSOE. El diputado socialista Francisco González Cabaña informó el pasado junio de que el Gobierno había reconocido a través de una respuesta parlamentaria que en los diez primeros meses de 2013 «sólo había ejecutado el 19,60% de la inversión de los 68,3 millones para el proyecto del nuevo puente de acceso a Cádiz, consignados en los Presupuestos del Estado (PGE) de 2013». A los socialistas no le salen las cuentas del puente.

De vacaciones forzosas

Las subcontratas rematan en estos momentos parte del trabajo que iniciaron a primeros de semana para abandonar los tajos a partir del lunes. Algunos operarios temen despidos durante este periodo de vacaciones forzosas. Fomento ha consignado 61 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2014 para la obra del puente y reparte entre 2015 y 2016 el último pago de 46,9 millones y de 1,6 millones, respectivamente. La construcción del nuevo acceso a Cádiz ha sufrido dos grandes paralizaciones desde su inicio en la primavera de 2007. Ambos parones han favorecido un retraso de casi dos años en la culminación del viaducto. La primera de ellas tuvo lugar en junio de 2010 por impagos de tres certificaciones de obra de Fomento a Dragados, así como la ralentización de 2011 y los contratiempos sufridos entre 2012 y 2013. En este último año varios temporales con fuerte viento de levante dieron al traste con todos los pronósticos para su apertura. Esta situación obligó a los técnicos a elevar en dos ocasiones al Ministerio un nuevo calendario de finalización de la obra y combatir así el retraso que acumulaba el proyecto, acrecentado en la última etapa de gestión del Gobierno socialista.

La obra se adjudicó en 2007 por 273 millones de euros y suma a estas alturas 473,5 millones de euros. La ministra de Fomento, Ana Pastor, indicó el pasado noviembre durante una visita a Cádiz que ya no había motivos para retrasar un minuto más la obra, ya que su financiación estaba garantizada hasta 2016. Fomentó cesó ese mismo mes al que había sido jefe de obra durante los dos últimos años, el ingeniero Julio Domingo de la Blanca, y nombró como nuevo responsable a Fernando Pedrazo, un veterano de la casa que había sido jefe de Planeamiento y Proyectos de la Demarcación de Carreteras de Extremadura. La gestión de Pedrazo se ha traducido en un fuerte impulso en los seis primeros meses de 2014. El subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, señaló que «se estudia la cuantía económica y se negocian las condiciones para firmar ese modificado y poder continuar la obra». Confía en que el trámite «concluya en breve».