Dos años, más, de abandono

Han pasado dos años. La mitad de la teórica duración total de la legislatura. La comenzaban socialistas e Izquierda Unida con una coalición que le servía para apartar de la Presidencia de la Junta de Andalucía al partido más votado, el de los populares. La alianza de izquierdas ha supuesto alguna hora de atención para los representantes de este partido y esta coalición. Ha dado para una sonada espantada de José Antonio Griñán, para la llegada de la primera mujer al máximo nivel ejecutivo del Gobierno autonómico. Ha servido para dar un par de titulares huecos sobre desahucios y economía que se han quedado en nada. Ha dado para algunas fotos y para debates estériles. Pero, para los gaditanos, para los ciudadanos que votan a la espera de colaboración y se mantienen al margen de la endogámica vida de las formaciones políticas, no ha pasado nada. Los dos años de este nuevo equipo, antes y después del relevo, se han saldado con más abandono por parte de la Junta de Andalucía, que pretende hacer pagar en los residentes en esta ciudad su impotencia para arrebatar de forma democrática la Alcaldía a Teófila Martínez desde 1995. Ningún proyecto ha arrancado, ni las grandes obras, ni los grandes edificios abandonados pendientes, ni un plan de empleo, ni un desempleado menos, bien al contrario. En la práctica, con los números en la mano, con los datos y al margen de las palabras que llenan los titulares o los informativos, los gaditanos no han tenido noticia de la Junta de Andalucía. Ni un sólo cumplimiento, ni un avance, todo renuncias, excusas, declaraciones altisonantes pero un fracaso absoluto, un cero rotundo, en el apartado de gestión real y práctica. Cabría decir que sólo son dos años pero resulta que antes hubo 30, con frutos similares, de políticas socialistas.