Más que unas municipales

Hoy concluye en Toledo la Convención Municipal del PP, que desde ayer se celebra en Toledo. Y los diversos intervinientes -Cospedal, Arenas, González Pons- han defendido la tesis de que el 22 de mayo no sólo se vota para la elección de corporaciones locales y parlamentos autonómicos: también se elige entre las políticas de Zapatero y las de Rajoy. En consecuencia, si, como pronostican las encuestas y asegura la intuición de la mayoría de los analistas, la debacle del PSOE fuera muy abultada y el triunfo del PP, arrasador, la opinión pública reclamaría con toda la razón al presidente del Gobierno que abreviara la agonía del Ejecutivo y convocara anticipadamente elecciones generales. La argumentación es tan certera como inapelable. Hasta ahora, la tesis que utilizaban los socialistas para negarse a adelantar el fin de la legislatura era que este país necesitaba todas sus energías para realizar el ajuste, llevar a cabo las reformas estructurales y evitar que España tuviera que ser rescatada como Grecia e Irlanda. Sin embargo, la crisis de Portugal, que no ha agravado la posición española, ha demostrado indirectamente que España ya ha salido de la situación de riesgo. Si se confirma esta sensación, ya no habrá motivo para negarse a oxigenar la política y la economía mediante unas elecciones.