Por un mercado sin filtraciones

Las obras de la reparación de la cubierta en el edificio del mercado central de abastos avanzan a buen ritmo. Los trabajos, que se realizan con cargo al Plan Proteja 2010, tienen como objetivo conferir garantías mínimas de estanqueidad sin alterar el diseño de la cubierta. La delegada de Medio Ambiente y Sostenibilidad, África Becerra, explica que de esta forma «se completa la rehabilitación que en los últimos años ha acometido este gobierno municipal en este emblemático edificio; cuando concluyan las obras se habrá conseguido eliminar las humedades y las filtraciones de agua preservando la estructura».

El proyecto, con un presupuesto que asciende a 78.965 euros y que está cofinanciado por el Ministerio de Administraciones Públicas, se plantea manteniendo la construcción actual, los alzados, la cubierta -la actual de teja y metacrilato-, las superficies construidas y lo volumetría existente. Los trabajos consisten en la sustitución de paños de metacrilato en mal estado y sustitución de juntas de unión y pletinas entre paños y en puntos singulares como cambios de pendiente, encuentros entre faldones y paramentos, así como su llegada a los canalones. En las cubiertas de tejas, se procede al arreglo de los canalones ocultos, levantando y sustituyendo zonas de la teja en mal estado, recuperándose siempre que sea posible.

Se están tratando especialmente los puntos singulares de la cubierta, como encuentros entre faldones, encuentros de faldones con paramentos verticales, encuentros de faldones con desagües, bordes extremos de faldón y juntas.

El mercado central de abastos ha sido beneficiado con algunas de las más importantes inversiones de las desarrolladas en la zona centro por el actual gobierno local, según destaca Becerra. Desde la primera gran intervención en la nave del pescado hasta las obras de reordenación de las zonas donde se instala la venta ambulante en las calles Parada y Barreto y en Doña Blanca se han invertido alrededor de 2,2 millones de euros.

Cabe recordar que el Ayuntamiento y Junta cofinanciaron al 50% las obras de la nave del pescado del mercado de abastos, que supusieron una inversión de 1,1 millón de euros. Las mismas propiciaron unas instalaciones «más accesibles, higiénicas y modernas». Los puestos fueron dotados de importantes mejoras, entre ellas suministro de agua, electricidad y conexiones telefónicas con posibilidad de acceso a internet. Y se instaló el sistema de aire acondicionado, con un presupuesto de 360.000 euros. También se llevó a cabo el acondicionamiento de la zona exterior del mercado.