Condenado a seis años de cárcel por violar a la compañera de trabajo de su novia

«Yo soy malo, un marroquí malo y me he enamorado de ti». Con estas palabras, Y. Ch. agarró a su víctima del brazo, la metió en su cuarto y la violó. Ella trató de resistirse, pero por miedo se plegó a su violador. El joven de 22 años y origen marroquí, ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Cádiz a seis años de cárcel como autor de esta agresión sexual, que se cometió en mayo de 2008 en el piso que él compartía con otros tres chicos en Sanlúcar.

La víctima era compañera de trabajo de su novia, aunque se encontraba en la vivienda porque había ligado aquella noche con uno de los inquilinos de piso. Era ya de día cuando los compañeros de Y. Ch. se marcharon y la chica se quedó a solas con él. Poco podía imaginar que reaccionaría de forma violenta, desnudándola a tirones y forzándola a mantener relaciones sexuales con él.

El testimonio fue suficiente

El agresor reconoció durante el juicio que se acostó con la chica, pero alegó que la relación había sido consentida. No hubo testigos, pero los magistrados de la sección cuarta de la Audiencia Provincial han considerado probado que se dio una violación, para lo cual han tenido en cuenta sobre todo el testimonio de la víctima, «como prueba suficiente y apta», ya que mantuvo en todo momento una versión coherente y no consta «problema anterior o resentimiento» con el condenado, que pudiese llevar a pensar en una denuncia falsa. La joven presentaba, además, numerosas contusiones y heridas provocadas, según el tribunal, por los tirones y el forcejeo al que fue sometida.

La fiscalía y solicitó que el acusado fuese enviado a prisión al menos nueve años por la violación, pero el tribunal le ha impuesto finalmente la menor pena prevista en el Código Penal para este delito. Además, condena al joven marroquí a pagar una indemnización de 3.000 euros a su víctima, por los daños causados.