Garvey pide a Competencia que no aplique la sanción al Consejo del Vino

La atención con la que desde la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) se controlan las operaciones en el Marco de Jerez resulta tan desmedida que ayer incluso el Grupo Garvey, una de las empresas que inició la primera de las investigaciones por su denuncia del cupo de ventas, reclamó clemencia al organismo presidido por Luis Berenguer para que no aplique al Consejo Regulador del Vino la sanción de 400.000 euros impuesta por ese primer expediente.

Desde el grupo bodeguero propiedad de la familia Ruiz-Mateos dejaron claro ayer que cuando decidieron recurrir ante la CNC el cupo de ventas fue porque el Consejo Regulador «alteró el tradicional sistema de cálculo según las existencias para adoptar uno que fijaba un límite para cada bodega en función de la media de sus ventas de las cinco últimas campañas». Según afirman desde Garvey, «ese sistema favorecía a las grandes bodegas, que tenían un mercado consolidado, y perjudicaba a las que estaban en proceso de expansión, limitando sus ventas».

Por ese motivo, Garvey «tuvo que defender su posición puesto que, siendo una empresa en claro crecimiento, vio cómo de forma discriminada su cupo se veía reducido de un 37% de sus existencias a menos del 14%».

Desde la empresa insistieron en que se vieron «obligados» a impugnar esos cupos máximos de venta, ante la CNC y también ante el Juzgado de lo Mercantil, «como última medida después de intentar, extrajudicialmente, que el Consejo Regulador dejara sin efecto esos cupos máximos de venta ilegales».

No en vano, Garvey considera que en su actual situación (110.000 botas -55.000.000 litros- de existencias de vino y con una amplia cartera de clientes que atender) si no se hubiera defendido esta postura no habría podido atender correctamente a sus clientes. Hay que recordar que en su momento incluso tuvieron que «comprar más existencias, con su correspondiente cupo, para no incurrir en la falta de servicio a clientes con el componente económico que conlleva».

Sin embargo, desde la empresa propiedad de los Ruiz-Mateos también recordaron que tras la resolución de Competencia condenando el cupo, y la del Juzgado de lo Mercantil adoptando la medida cautelar de suspender la aplicación de esos cupos, el propio Consejo Regulador dio marcha atrás y «dejó sin efecto los ilegales cupos que había fijado en función de las ventas de las últimas campañas».

De esta forma se restableció el sistema tradicional del Marco de Jerez que era igual para todas las bodegas, por lo que Garvey defiende que su iniciativa de acudir a la CNC «ha beneficiado al conjunto de la Denominación, especialmente a las bodegas que resultaron ilegítimamente perjudicadas».

En este punto, y pese al anuncio de Competencia de que multara con 400.000 euros al Consejo Regulador, Garvey hizo hincapié ayer en que se da por satisfecha con que se restableciera la legalidad y «no desea ni tiene ningún interés en que se produzcan sanciones económicas contra nadie».