El Banco de España confirma que los sueldos bajaron entre 2010 y 2012

El Banco de España asegura en su último boletín económico que el proceso de moderación salarial que se inició en 2010 "podría ser algo más intenso" de lo que indican las estadísticas agregadas sobre costes laborales. Según los gráficos que adjunta el informe de la institución, los salarios reales cayeron el 1% en 2011 y otro 1% en 2012. Sin embargo, los salarios reales netos una vez tenidos en cuenta los efectos de composición bajaron el 2% en 2011 y también el 2% en 2012, el doble.

¿Por qué una caída supone el doble que la otra? "Por el mayor peso relativo de grupos de trabajadores con mayor remuneración media", explica el informe del Banco de España. ¿Y cuáles son esos grupos relativos? Según destaca el instituto emisor, los trabajadores de menor nivel educativo han pasado de representar el 14,8% del total de ocupados al 10%, mientras que los empleados con más de tres años de experiencia pasaron de representar el 61,7% del empleo en 2008 a representar el 73% en 2012.

Es decir, en ese periodo se habría reducido de manera muy importante el número total de trabajadores (como muestran las estadísticas del INE y de la EPA), pero ese descenso se habría notado sobre todo en el personal menos cualificado, o sea, los que menos cobran. "Es preciso tener en cuenta (estos cambios) a la hora de hacer un diagnóstico preciso sobre la evolución de los costes laborales", resalta el Banco de España.

Estos cambios importantes en la composición del empleo, a juicio del Banco de España, "podrían explicar una parte del incremento de los salarios reales que se observó en las fases iniciales de la crisis, aunque el incremento salarial neto de estos efectos fue aún positivo, a pesar del intenso deterioro sufrido por el empleo. A su vez, el proceso de moderación salarial que comenzó en 2010 podría ser algo más intenso de lo que indican las estadísticas agregadas sobre costes laborales". Sólo a partir de 2010, precisa el Banco de España, los salarios comenzaron a mostrar un comportamiento "más acorde" con la debilidad del mercado laboral.