Stallone no se ha tomado demasiado mal su fractura de cuello. :: CHRIS PIZZELLO
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Los tipos duros también lloran

Silvester Stallone se rompió el cuello durante el rodaje de una pelea muy bestia. «Me operaron y llevo una placa de metal»

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Andaban a mamporrazos y a alguno se le fue la mano sin querer. Y eso son palabras mayores teniendo en cuenta que el grosor del brazo del que lo exhibe en la foto es del tamaño de un muslo de cualquiera. Pues ahora hay que imaginarse catorce bíceps de este calibre dando y repartiendo sin piedad y, sobre todo, sin mirar. Rodaban Silvester Stallone y varios brutos de Hollywood entre los que se hallaba otro 'mamporrero' habitual como Schwarzenegger la secuencia de una pelea para la película 'The expendables' y 'Rambo' acabó directamente en la enfermería con una fractura en el cuello.

«Tío, había siete tipos, pegándose los unos a los otros, cada uno más fuerte que el siguiente. Sin bromas, nuestros dobles estaban clamando misericordia», ha relatado Stallone recientemente a la revista FHM, evocando un episodio que podría haber acabado mucho peor y que él cuenta como una anécdota incluso graciosa. Tumbar en la camilla a un tipo así ya es difícil, pero Stallone medía fuerzas con 'Stone cold', nombre artístico de un antiguo luchador profesional. Los guantazos eran «tan fieros» que acabó con una vértebra rota. «No bromeo, no se lo he dicho a nadie pero después tuve que someterme a una operación muy seria». Le intervinieron de urgencia y el resultado es «una placa de metal en el cuello» que el actor, de 63 años, lleva desde entonces. Lástima que no deje marca como las heridas de guerra.

Fue Stallone el único que salió maltrecho pero podía haberse liado gorda porque además de él ejercitaban músculos Arnold Schwarzenegger, Bruce Willis y Mickey Rourke, que participan también en 'The expendables', una película que narra la aventura de un grupo de mercenarios que tratan de derrocar a un dictador latinoamericano y en la que hay explosiones y golpes a diestro y siniestro.

La dirección del filme y el guión fueron cosa de Stallone, que también se reservó uno de los papeles protagonistas en esta exhibición de musculatura que hacen entre todos y que anima el ojo al espectador. No se debía fiar de actores jovencitos y cachas y recurrió a sus amigotes de siempre, Willis y compañía, algunos ya pasada la sesentena y otros a punto de estrenarla, pero incombustibles y acostumbrados a partirse la cara cuando el guión lo exige.

La película comenzó a rodarse el pasado mes de marzo en escenarios de Río de Janeiro pero no llegará a las salas hasta mediados de 2010. En los títulos de crédito aparece también la actriz Brittany Murphy, que murió repentinamente el pasado diciembre en su casa de Los Ángeles a los 32 años de edad.