España se acerca a los cuatro millones de parados

Nunca la lista de parados había sido tan abultada como el pasado 31 de diciembre, cuando 3.923.603 personas estaban apuntadas en los Servicios Públicos de Empleo (antiguas oficinas del INEM) en busca de una colocación. Ese total era un 25,4% más elevado que el registrado en la misma fecha de 2008 con 794.640 desocupados más, procedentes de todos los sectores. Pero, lo más dramático de la situación es que la salida del túnel no se ve. El Gobierno tiene asumido que el colectivo seguirá aumentando. Incluso, la secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo, dudó este martes de que la recuperación del empleo «pueda ser en el propio año 2010».

El año terminó con 17.640.018 afiliados, 665.595 menos que los contabilizados el 31 de diciembre de 2008. El secretario de Estado, Octavio Granado, reconoció que «el año ha ido mal en términos de afiliación» pero resaltó que la Seguridad Social terminará con superávit, por lo tanto financieramente el ejercicio es positivo.

No obstante, el único informe válido sobre el mercado de trabajo para las comparaciones europeas es la Encuesta de Población Activa (EPA). La correspondiente al cuarto trimestre con la evolución de 2009 se conocerá el próximo 29 de enero. La última ya arrojaba una tasa de paro del 17,9% con más de 4,1 millones de desocupados. Para Rojo, quien recordó que el índice previsto por el Gobierno para 2010 es del 18,9%, los datos de los Servicios Públicos de Empleo y los recogidos por la EPA «son sistemas diferentes» de medir la situación laboral.

Andalucía, por otra parte, cerró el año 2009 con 851.493 parados, lo que significa un incremento de 132.115 personas respecto a un año antes, es decir un 18,37%, siete puntos por debajo de la subida media nacional. Del total de parados de Andalucía, 86.731 son menores de 25 años y, de ellos, 50.078 son hombres y 36.653 mujeres.

Las provincias andaluzas donde creció menos el paro fueron Córdoba (13,18%) y Cádiz (13,80%).

Coste del desempleo

La cobertura de paro tuvo un coste de 34.000 millones de euros en 2009, según adelantó este martes la secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo. El montante requerido desborda las previsiones del Gobierno que se ve obligado a cumplir por ley el derecho de los desocupados que han cotizado durante su vida laboral para tener protección llegado el momento de quedarse sin empleo. El número de beneficiarios se ha duplicado en dos años al pasar de 1,5 millones de parados en 2007 a cerca de los tres millones en el ejercicio que acaba de terminar.

Los últimos datos disponibles del Ministerio de Trabajo e Inmigración se refieren a noviembre (siempre hay un mes de diferencia entre el paro registrado y la cobertura) y reflejan que la cuantía media era de 961,4 euros al mes por desocupado (incluidas las cotizaciones a la Seguridad Social). Se trata de un importe superior en un 35% al salario mínimo interprofesional (SMI), situado en 2009 en 624 euros.

Menos mujeres

En el conjunto de España, las mujeres frenaron el crecimiento del paro debido a que continuó el desplome de la construcción, un sector masculinizado. Así, el desempleo femenino mensual bajó en 17.478 trabajadoras, mientras subió en 72.135 varones. El resultado final fue de 54.657 parados más inscritos. En el análisis anual, el paro de los hombres ha crecido un 27,7% y en 436.069 personas; y el de las mujeres un 23% y en 358.571.

El aumento en construcción afectó en diciembre a 54.936 desempleados nuevos. En términos relativos la subida fue del 7,5%.

El motivo de este incremento radica en que diciembre siempre es un mes en el que concluye numerosas obras, factor que en 2009 se ha notado más al remitir la construcción residencial, según aclaró la secretaria general. A su juicio, otras causas han sido la terminación de los proyectos del «Plan E» y el mal tiempo que obliga a la suspensión de la actividad.

Por otro lado, en diciembre se realizaron 1.137.565 contratos, cifra a todas luces insuficiente para atender la mano de obra sobrante. Además, las colocaciones creadas se caracterizaron una vez más por su temporalidad. El 92,5% de ellas nació con fecha de caducidad o, lo que es lo mismo, solo 85.827 tuvieron carácter indefinido.

En términos anuales acumulados, los contratos indefinidos a tiempo completo alcanzaron en 2009 un total de 859.629, el 35,73% menos que en 2008. Igualmente descendieron los contratos indefinidos a tiempo parcial, pese a que su fomento es una de la prioridades del Ejecutivo arrastrada desde hace tiempo. A lo largo del ejercicio se suscribieron 452.785, un 19,88% menos que en el año anterior.