Rocío Ávila. / J. C. CORCHADO
Jerez

Suspendido el juicio del menor que se ahogó en un centro de Málaga

La Junta ha alegado que la madre del chico no es competente para solicitar una indemnización

JEREZ Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El caso del menor jerezano de doce años que murió ahogado en un centro de Málaga se ha complicado de forma totalmente inesperada para la familia. Ayer, tras tres años de horrible espera por fin se iba a celebrar el juicio de faltas contra el cuidador del chico y la Junta de Andalucía, en calidad de administración responsable.

Sin embargo, cuál fue la sorpresa de Rocío Ávila, la madre del menor, y de su abogado, Juan Manuel Delgado, cuando una vez personados en los juzgados malagueños el magistrado les informó de que la vista se había suspendido.

La sorpresa inicial se tornó en indignación cuando fueron conscientes del motivo: la Junta ha alegado que Rocío no es competente para pedir una indemnización por los hechos, porque cuando sucedió la tragedia no tenía la patria potestad de su hijo. Así lo explicó tras la salida de la sala el letrado, aclarando que en ningún caso se debe confundir la patria potestad con la guarda y custodia.

Mientras que en el primero de los casos se priva a los padres de cualquier poder sobre los hijos, en el segundo simplemente se establece quién se queda físicamente con ellos. Esto último fue lo que le ocurrió a Rocío, como así aparece en las sentencias de separación y divorcio que su abogado mostró al juez para echar por tierra los argumentos de la Administración.

Según Delgado, durante la separación se otorgó la custodia a la abuela paterna de los niños, a la que luego se retiró para devolvérsela a su madre en la sentencia de divorcio. Una trágica coincidencia se produjo cuando Rocío fue informada de que le era devuelta la custodia de sus dos hijos, justo el mismo día en el que horas después moría uno de ellos en el centro en el que estaba interno.

Falta de información

El enfado de la acusación va más allá, pues el letrado lamenta que fueran informados de las alegaciones y la suspensión de la vista justo el mismo día, habiéndose trasladado a Málaga para hacer el viaje en balde. Todo esto sin olvidar que la intención de la familia era la de que se imputara al cuidador un delito por imprudencia y no una falta, por lo que Rocío se encuentra en estos momentos desolada y sólo espera que se acabe su calvario lo antes posible.

En el supuesto de que el juez decidiera no celebrar el juicio, Delgado presentará un recurso ante la Audiencia provincial de Málaga al entender que «esto no podrá quedarse así».