el rocío

La Aldea ya se siente gaditana

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La flauta rociera y el tambor comenzaron ayer desde bien temprano con sus sones para despertar a los romeros que acompañan a la hermandad gaditana. El cansancio en los rostros de los rocieros comienza a dejarse notar de manera notable en aquellos que la noche del miércoles la pasaron en vela cerca de la carreta del Simpecado. Éste también empieza a sufrir los días de camino ya que sus flores comienzan a marchitarse y el polvo cada vez se encuentra más impregnado en la plata fina de sus varales.

A las 10 de la mañana comenzaban los primeros hermanos a salir de sus tiendas de acampada. Recogieron sus bártulos y emprendieron su tercer día de camino, no sin antes realizar el rezo del Ángelus a las 12 del mediodía. Numerosos hermanos se dieron cita en torno a la carreta del Simpecado. Diego González, entonaba las oraciones mientras que los hermanos gaditanos acompañaban con sevillanas. El sol en todo lo alto anunciaba un nuevo día de calor en el que las arenas se mostrarían mucho menos duras que en la jornada del miércoles. A las 12.35, la caravana abandonaba el Corral de Félix y emprendía el camino por el cancelin, por donde algún que otro vehículo tuvo algunos problemas para sortear las dunas. Los caballistas de la Asociación de Guadalcacín, que por primera vez hacen el camino junto con la hermandad de Cádiz, abrían el paso con el banderín azul de camino. Seguidamente, la carreta, acompañada de los casi 45 todoterrenos y las cinco bateas. A un ritmo constante se llegaba a la Laguna del Sopetón a las 13.45 para realizar la el rengue de almuerzo. José Luís Pérez y su hijo colocaban la carreta del Simpecado bajo un pinar mientras desenganchaban las mulas para que pudieran refrescarse en uno de los pilares dispuesto para su descanso. Era el momento en el que los hermanos se disponían a pasar un nuevo rato de convivencia.

Palacio de Doñana

A las 15.25 minutos se organizaba de nuevo la caravana rociera para emprender el camino en busca del Palacio de Doñana, lugar de residencia del presidente del Gobierno cuando visita el Parque Nacional. Comenzaba así el trecho del camino más liviano para los romeros. Los peregrinos que acompañaban andando a la carreta del Simpecado lo agradecían, ya que tras la jornada del miércoles, en la que la dureza de las arenas provocó algún que otro tirón muscular, muchos devotos requirieron el tratamiento de los miembros de Protección Civil, que forman parte del dispositivo del Plan Romero. El único inconveniente era la ausencia de pinares que, junto con la fuerza del sol, hacía que aumentara la sensación de calor sobre la arena. Afortunadamente, la brisa del viento que soplaba refrescaba a los romeros gaditanos. A las 18.40 horas, el Simpecado marinero hacía su entrada en la zona de Palacio de Doñana, donde se aprovechaba para llegar los depósitos de agua que utilizan los romeros para asearse y donde los hermanos detenían la carreta para cantar sevillanas al Simpecado regalando otro de los momentos emotivos del camino.

A continuación, se emprendía camino hacia el Aguaperal, donde se tenía previsto llegar para realizar la acampada a las 21 horas de la noche aproximadamente. La Raya de las Perdices, donde la vegetación existente no supera el metro y media, dibujaba una estampa maravillosa con la carreta acompañada de todos los hermanos. Poco a poco la tarde se iba alejando y daba paso a la última noche de camino para los romeros gaditanos durante el camino de ida. La aldea está cada vez mas cerca.

Ultima noche

Tras tres duros días de camino, la última noche de la ida se presagiaba intensa para los romeros que prefirieron aprovecharla para cantar las últimas sevillanas en la noche. Las hermandades la Línea y de Arcos acompañaron a la de Cádiz. Ambas realizaron su entrada en el Parque Nacional el martes por la mañana y lo abandonarán hoy viernes a partir de las tres de la tarde. Debido a la prohibición de realizar candelas en la noche, los hermanos encendieron unas velas, que procedían de la Hermandad de Penitencia de la Soledad de la localidad de San Fernando, que se las cedió a la corporación rociera de cara a las noches del camino. En torno a las 23.30 se acercaban los primeros romeros, provistos de abrigo ya que la noche refrescó de manera notable con respecto a las anteriores, ya que la poca presencia de eucaliptos no daban el refugio suficiente como para protegerse el viento. A las doce de la noche, se comenzaba el rezo del Santo Rosario, ultimo del camino de ida.

Llegada al Rocío

A las 10 de la mañana de hoy, los romeros gaditanos celebrarán una Eucaristía presidida por el Director Espiritual, Óscar González. Será el día esperado, tras cuatro jornadas de travesía por las arenas de Doñana. Después del rezo del Ángelus, a las 12, se procederá al bautizo de los hermanos que por primera vez realizan el camino con la hermandad de Cádiz. La Raya Real dará paso a los pinares de la Canaliega donde se realizara la última parada para almorzar antes de entrar en la Aldea. Los romeros gaditanos tienen previsto la entrada en la aldea almonteña a las cinco y media de la tarde. En la casa de Hermandad en la Aldea, situada en calle El Cohetero, los hermanos que no han podido acompañar al Simpecado por el camino los esperarán a las puertas de la casa.

El susto

El susto de la jornada lo protagonizaron dos peregrinas de la Hermandad del Rocío de Jerez, cuya identidad se desconoce, que estuvieron perdidas desde las 14.50 horas hasta las 18 en el Palacio de Las Marismillas. Fueron localizadas finalmente con síntomas de deshidratación y, en uno de los casos, un cuadro de histeria.