La tele barre a Almodóvar

Ni el Oscar de Penélope ni Almodóvar omnipresente. La película española más vista en lo que va de año sólo ha necesitado el reclamo de los jóvenes actores de teleseries al desnudo para arrasar en taquilla. Mentiras y gordas ha inundado de adolescentes las salas de centros comerciales, amasando 1,8 millones de euros el pasado fin de semana. Casi 300.000 espectadores. Justo el doble de lo conseguido por Los abrazos rotos cuando se estrenó. La diferencia es que el filme de Almodóvar contó con un presupuesto de 15 millones de euros y salió con 246 copias, frente a los 3 millones escasos que ha costado la cinta de Alfonso Albacete y David Menkes, disponible en 214 cines.

Los productores españoles agrupados en FAPAE se congratulaban ayer de «los resultados excepcionales» del fin de semana, que demostraban «la competitividad del cine español». El éxito abrumador de Mentiras y gordas más bien confirma el tirón de las series, que han establecido un star system capaz de enganchar al único público que acude a las salas: el adolescente. Ana de Armas, Hugo Silva, Ana Polvorosa, Alejo Sauras, Yon González y Mario Casas provienen de teleseries como El internado, Los hombres de Paco y Aída. Todos ellos aparecen sin ropa en una historia trufada de sexo y drogas, que la crítica ha masacrado por su retrato estereotipado y moralizante de la juventud actual.

«Ha sido una sorpresa. Y más en estos tiempos de crisis, en los que siempre se habla del cine español para mal», reconocía ayer un eufórico Alfonso Albacete. «Los jóvenes tienen menos prejuicios y van al cine cuando se les habla de tú a tú. Esta es una película difícil, dura, fuerte. Es maravilloso ver cómo gritan y ríen cuando la ven, casi como si estuvieran en un videojuego».

Albacete admite el tirón de los rostros televisivos, «que son los que van a hacer cine y han demostrado ya su versatilidad». Defiende la eficacia de la campaña promocional: «Si Sony no nos hubiera lanzado como si fuéramos una película americana, no habríamos tenido esta recaudación». Comparados con Almodóvar por sus temáticas en sus primeros trabajos, los autores de Atómica y Más que amor frenesí han acabado superando al manchego, que con Los abrazos rotos ha sufrido el peor debú en taquilla de sus últimos largometrajes. Lleva recaudada la nada despreciable cifra de 2,3 millones de euros, pero su estreno apenas hizo la mitad de lo conseguido hace tres años por Volver. Alfonso Albacete no le resta méritos. «Es el maestro, un genio del cine. Su película tendrá un largo recorrido de premios y taquilla en todo el mundo».