Bono se apartará de la política cuando deje de presidir el Congreso

El presidente del Congreso ha asegurado que su actual cargo será el último que ocupe en su vida política. Adelanta así una despedida que no sería la primera. Cuando José Bono dimitió al frente del Ministerio de Defensa ya anunció que se retiraba. Poco después cambió de idea cuando el presidente Zapatero le ofreció la presdiencia de la Cámara Baja si el PSOE reeditaba la victoria electoral en los comicios de marzo pasado.

José Bono ha asegurado que estar al frente del Congreso de los Diputados es "un puesto de término de los más honrosos que puede tener cualquier político". Respondía así, en un desayuno informativo de Europa Press, cuando le preguntaban si pensaba en la retirada y si volvería a dar marcha atrás, como hizo cuando salió del Gobierno en abril de 2006.

El presidente de la Cámara Baja ha explicado que el mismo día que abandonó su cartera ministerial el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ya le propuso que concurriese a las elecciones generales y que, si volvía a ganar el PSOE, su intención era presentarle como candidato para presidir el Congreso. "Inicialmente pensé que faltaba mucho tiempo", ha dicho, aunque después admitió sentirse "extraordinariamente honrado con la propuesta" y "lo que era una decisión firme (abandonar la primera línea política) se modificó después, y aquí estoy".

En cualquier caso, ha subrayado que, esta vez sí, su cargo es "un puesto de término, y de los más honrosos que puede tener cualquier político". "Me siento muy honrado y agradecido", apostillaba.

También ha asegurado que no se arrepiente de rechazar la propuesta inicial de Zapatero de presentarse a las elecciones municipales como candidato a la Alcaldía de Madrid. Tras un baile de nombres intenso, que pasó desde el propio Bono, que se dejó querer, a la vicepresidenta primera, Maria Teresa Fernández de la Vega, el elegido terminó siendo el ahora ministro de Industria, Miguel Sebastián. El 'popular' Alberto Ruiz Gallardón le arrolló en las urnas y el candidato socialista ni siquiera llegó a recoger su acta de concejal.

Bono ha apuntado que "cuando me habló del asunto (Zapatero) le dije que le agradecía el honor", aunque posteriormente rechazó el ofrecimiento porque consideró que sería "imperdonable" ser candidato a la Alcaldía de una ciudad en la que no había nacido y en la que ni siquiera vive.

Diferencias con el PSOE

Bono ha vuelto a hacer gala de su militancia en el PSOE, al que se afilió en 1969, y en el que quiere seguir "mientras viva", aunque ha aprovechado para explicar que eso no significa que "tenga que pensar milimétricamente" lo mismo que la secretaria general del partido, Leire Pajín, una de la pocas representantes socialistas presentes en el acto.

En otro momento del coloquio, a Bono se le ha preguntado si continúa teniendo la intuición de que Zapatero no optará a un tercer mandato en 2012. Al principio ha rehusado contestar y ha recurrido a una cita de Baltasar Gracián: "Es prudente resolver los problemas que entran en tu casa, pero imprudente salir a la calle a buscarse problemas, y yo -puntualizaba- ya me he buscado bastantes".

Pero cuando se le ha invitado a decir a quién le gustaría ver como cartel electoral del PSOE si Zapatero decide no repetir, sí ha animado a subrayar que, en su opinión, la sucesión no está abierta. "Niego el supuesto de que esté abierta la sucesión a la Presidencia del Gobierno, porque ni hay elecciones ni en el PSOE imaginamos un mejor candidato que el presidente del Gobierno".

Tampoco ha querido detallar, alegando que no sabía "nada" de ello, más allá de lo que se ha publicado, si veía próxima una hipotética remodelación del actual Gabinete de Zapatero, de la que se ha empezado a hablar a raíz de que el jefe del Ejecutivo anunciara la creación de un Ministerio de Deportes.