La contratación de hipotecas cayó un 30% en los primeros cinco meses

El Instituto Nacional de Estadística (INE), ya casi reconvertido en institución para el diagnóstico de crisis económicas, hizo públicos ayer los datos sobre contratación de hipotecas y compraventa de viviendas referidos al mes de mayo. Malas noticias, suma y sigue. Ya se ha dicho en no pocas ocasiones que el sector inmobiliario se había convertido en motor que hacía avanzar la economía española y que su estornudo es el catarro de otros muchos sectores.

La caída en la contratación de préstamos para la compra de una vivienda en el mes de mayo fue del 14,8% con respecto a abril. Si esta cifra deja, por sí misma, una clara imagen de cuál es la situación del ramo, aún más diáfanos resultan otros datos que se pueden extrapolar de las estadísticas de los últimos meses. Durante los cinco primeros meses del año se contrataron 4.569 hipotecas menos que durante el mismo periodo de tiempo del ejercicio 2007. Esto supone una reducción del 29,4%.

El secretario general de la federación de constructores gaditanos, Emilio Corbacho, puso sobre la mesa la posibilidad de que estos datos sean incompletos y añadió que la percepción de los empresarios del sector es que la caída es aún mayor. El portavoz de los promotores inmobiliarios explicó que los empresarios que existe «una clara ralentización en la demanda de vivienda» que se une a otro factor que resulta determinante para la marcha del negocio, lo que llamó «el cierre financiero en cuanto a la concesión de hipotecas». Corbacho señaló que la nueva política restrictiva adoptada por las entidades financieras a la hora de conceder préstamos para la compra de una vivienda pone en extraordinarias dificultades al sector.

Menos créditos

El empresario pronosticó que el pacto por la vivienda suscrito también por bancos y cajas con la Junta puede quedarse en humo si no existe una respuesta financiera que se adapte a la nueva situación económica y a las necesidades de los demandantes de estos créditos. «La concesión crediticia es el elemento más identificativo de la actual crisis», sentenció Corbacho, que pidió a la Administración autonómica una reacción que refuerce el cumplimiento de este acuerdo.

La reducción en la contratación de hipotecas tienen su reflejo en el espejo de la compraventa de casas. Durante el periodo enero-mayo de 2008 se realizaron un 25,2% menos de transacciones inmobiliarias de residencias con respecto a los mismos meses de 2007. Este descenso se experimentó especialmente en el mercado de la vivienda usada, en el que se desplomó un 39,4%. El de la nueva no tuvo una bajada tan vertiginosa, aunque es lo bastante acusado -con una caída del 17,6%- como para resultar revelador por sí mismo.

La situación de la provincia gaditana en estos dos termómetros del ladrillo es similar a la que se vive en el conjunto de Andalucía y España, aunque el descenso en la comunidad ha sido mayor que en Cádiz en lo que respecta a la contratación de hipotecas. La provincia está 2,2 puntos porcentuales mejor que la media andaluza y 1,4 puntos peor que la nacional. En lo que respecta a los datos de compraventa de vivienda, Cádiz está en la misma posición, aunque Andalucía y España intercambian su situación. El descenso en el número de transacciones inmobiliarias fue 1,9 mayor en toda España que en Cádiz; aunque en la provincia el bajón fue 1,6 puntos porcentuales mayor que el conjunto de Andalucía.

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