Chaves califica al consejero de Obras Públicas de «todoterreno de la gestión»

El Gobierno andaluz vivió ayer uno de los relevos más atípicos de toda su historia. La consejera saliente, María del Mar Moreno, hace apenas tres meses que prometió su cargo como titular de Obras Públicas, mientras que el consejero entrante, Luis García Garrido, hace unos cinco meses que ostentaba el mismo cargo. Manuel Chaves, presidente de la Junta de Andalucía, restó trascendencia a cualquiera de estos dos hechos y aseguró que el Ejecutivo no va notar el cambio. «El nuevo consejero es un todoterreno de la gestión y cuenta con gran capacidad política», acotó Chaves.

Luis García Garrido, por su parte, aseveró: «Asumo la Consejería con gran parte del trabajo resuelto, por lo que su reto es profundizar».

El nuevo consejero de Obras Públicas y Transporte, tras tomar posesión de cargo, mostró su satisfacción por la llamada de Chaves a la vez que alabó el paso de María del Mar Moreno por este área.

«La anterior consejera ha hecho un magnífico trabajo en muy poco tiempo, ha resuelto el acuerdo del Plan de Infraestructura para la Sostenibilidad del Transporte en Andalucía (Pista) que plantea la hoja de ruta de las inversiones de Andalucía durante los próximos años», subrayó.

Retos

Entre sus retos para esta legislatura el nuevo consejero destacó la vertebración de Andalucía, el cambio climático y la colaboración con el Estado a la hora de planificar las inversiones del Gobierno de España y del Gobierno andaluz en Andalucía.

María del Mar Moreno, que el lunes asumió su nueva tarea como secretaria de Relaciones Institucionales y Política Autonómica (número cuatro del PSOE), destacó que inicia esta etapa con mucha ilusión. Su pretensión es continuar siendo parlamentaria andaluza. No descarta, además, ser nombrada como senadora en representación del Parlamento.