Jerez

Una cama para 16

CALLE PORVERA La memoria del ejercicio 2007 del comedor social El Salvador arroja datos que debería dar que pensar a más de uno, ya que dibuja una realidad de esta ciudad desconocida para muchos y ante la que lo cómodo es volver la cara. Preocupante resulta que cada vez haya más familias jerezanas que van a pedir ayuda a esta institución gestionada por las Hijas de la Caridad, y que buena parte de las mismas son núcleos normalizados, o, lo que es lo mismo, alejados de los tradicionales grupos de exclusión.

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Especialmente llamativo resulta otro dato que, más que pensar, debería poner colorados a unos cuantos. El Salvador atendió en 2007 a 616 transeúntes, de los que 404 fueron personas sin techo. Es decir, gente que vive en la calle, en una ciudad que únicamente cuenta con un albergue público -el municipal- con capacidad para sólo 25 personas. Vamos, que la oferta asciende a una cama para cada 16 sin techo. Vergonzoso.

Resulta más que evidente que Jerez necesita, con urgencia, más albergues o una gran ampliación del que hay. Y que no se limiten a ofrecer un máximo de tres noches de cama, como se hace actualmente. Y que Servicios Sociales cuente con más y más completos programas de ayuda, apoyo y seguimiento para los que no tienen hogar. Y tantas y tantas otras cosas.

Aunque no guste a muchos, hay que ser conscientes de que en Jerez hay al menos 400 personas viviendo en la calle, que se dice pronto. Ignorar el problema, desde luego, no lo resuelve. Ni lo resolverá nunca. No basta con encomendarse a las Hijas de la Caridad.