ILUSIÓN. El combinado nacional de balonmano, antes de partir a Noruega. / EFE
BALONMANO CAMPEONATO EUROPEO

Llegó la hora de la verdad para España

La selección ultima su puesta a punto para el torneo, que comienza mañana

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

España ya está en Noruega, donde mañana jueves arranca un duro campeonato de Europa de balonmano que concede al campeón plaza directa para los Juegos de Pekín, el Mundial de Croacia y el próximo campeonato continental en Austria. Madrugón ayer para desayunar, cruzar Madrid y llegar a la Terminal 2 del aeropuerto de Barajas con las maletas cargadas de ilusión. Entre bostezos, los jugadores facturaron el amplio equipaje y embarcaron en el vuelo que les llevó hasta Ámsterdam, para posteriormente dar el salto a la península escandinava.

De momento no hay grandes novedades en la expedición. La confirmación tácita de la importante rotura fibrilar del capitán y portero de la selección, David Barrufet, lo que le aparta definitivamente del Europeo, cohesiona un grupo en el que Hombrados y el recién incorporado Sierra serán la pareja de porteros.

Una 'nueva' España

Juan Carlos Pastor se ha visto obligado a cambiar la dinámica del juego español, principalmente por la ausencia ya anunciada en diciembre de Rolando Uríos. El pivote hispano-cubano, seguramente el mejor del mundo en tareas ofensivas, limitaba las variables de cambios, aspecto en el que el vallisoletano lleva trabajando desde el principio de la concentración.

El cambio natural defensivo incluye a Asier Antonio, especialista en el centro, en el que Pastor tiene depositadas muchas esperanzas y que en los cinco partidos de preparación disputados ha rendido a un gran nivel.

Esto permitirá que España despliegue un juego más rápido, permitiendo en muchas fases del campeonato ver una defensa cerrada en 6-0, con hombres altos.

Otra de las preocupaciones que asaltan al cuadro técnico es la ausencia de grandes lanzadores desde el lateral derecho. Ortega y, en menor medida, Beláustegui, no destacan por el poderío de un brazo potente en el uno contra uno. Sin embargo, ofrecen continuidades con los extremos, en donde España tiene un gran ramillete de finalizadores: Rocas y Parrondo por la derecha y Juanín y Davis por izquierda. Eso permitirá que el juego tenga mayor profundidad, con otras alternativas que no sólo se basen en la primera opción de campeonatos anteriores con la figura de Uríos.