La UCA ordena «un análisis» de los gastos en tarjetas del anterior equipo rector

La Universidad de Cádiz dio ayer instrucciones para hacer un «análisis pormenorizado» de los gastos efectuados con tarjetas bancarias por parte del anterior equipo directivo y para indagar quién ha trasladado a la prensa la documentación sobre los pagos que se hicieron con ellas durante la etapa de gestión del rector Diego Sales.

Varios miembros del anterior equipo rector de la UCA utilizaron entre los años 2007 y 2011 las tarjetas corporativas para el pago de restaurantes y gastos superfluos. No obstante, la propia UCA ha asegurado que esos gastos están fiscalizados y entran dentro del protocolo y la representación institucional. En ningún caso ha sido para lucro personal.

En un comunicado, la Universidad de Cádiz explicó ayer que estas dos instrucciones responden a las decisiones que se abordaron el pasado martes durante la reunión del Consejo de Gobierno de la UCA, un encuentro en el que se trató la abundante documentación publicada esta semana por los medios de comunicación sobre el supuesto derroche de dinero que se hizo con estas tarjetas.

Según estas informaciones, el anterior equipo de gobierno de la Universidad, encabezado por el exrector Diego Sales, gastó con estas tarjetas entre el 2007 y el 2011 más de 380.000 euros, muchos de ellos en compras que podrían ser personales.

El Consejo de Gobierno de la UCA, que aseguró que los gastos con estas tarjetas contaron en todo momento con controles específicos y que fueron auditados sin objeciones, ha decidido ahora revisar estas cuentas.

Según explica en la nota de prensa en la que ayer dio cuenta la reunión del Consejo de Gobierno, se hará un «análisis pormenorizado de la aplicación de los gastos efectuados con tarjeta visa por el anterior equipo de dirección durante el período 2007-2011».

«Este análisis se llevará a cabo sobre los documentos que justificaron dichos pagos e importes», una tarea para la que la secretaría general dictó ayer una instrucción encomendando esta tarea al Gabinete de Auditoría y Control Interno en coordinación con la Gerencia.

Además, la UCA ha decidido indagar «la autoría del traslado de documentación oficial de la Universidad de Cádiz a la prensa para su publicación», una tarea que ha sido encomendada a la Inspección General de Servicios y al Gabinete Jurídico.

También contrastará los datos publicados con los de la contabilidad de la propia universidad, para estudiar un posible ejercicio de rectificación en el caso de que no coincidan y estudiar «sus consecuencias».

El caso de las tarjetas de la UCA ha provocado la movilización de los alumnos. La Asociación Estudiantil contra la Precariedad ha convocado hoy una concentración en el Aula Magna de Filosofía a las 9.30 horas para mostrar su rechazo al uso que hizo el anterior equipo rector de las tarjetas internas. Denuncian que con el dinero gastado se podrían haber pagado 500 matrículas.