Seguridad coche para viajar vacaciones Semana SantaRuedas, frenos y amortiguadores, el triángulo más importante en un vehículo

El «triángulo» de seguridad más importante del coche, y al que por tanto hay que prestar mayor atención, es el compuesto por los neumáticos, los frenos y los amortiguadores.

Según un estudio del Centro de Desarrollo en Innovación (CDI) de la cadena de talleres Confortauto, del buen estado y del correcto mantenimiento de esos elementos depende una conducción segura.

El centro ha analizado las revisiones efectuadas a 875 vehículos para comprobar la situación en la que habitualmente se encuentran esos elementos. Pues bien, en el caso de los amortiguadores el 68% de ellos estaba en buen estado, pero el 25% presentaba un funcionamiento regular (conviene revisar) y el 7% eran peligrosos y requerían un cambio urgente. Y eso que estos elementos fijan el vehículo al asfalto, por lo que de estar en mal estado dificultan la estabilidad y el control.

Lo apropiado es revisarlos cada 20.000 km y cambiarlos entre los 65.000 y los 90.000 km.

En cuanto a los frenos, los discos estaban bien en el 76% de los vehículos analizados, regular en el 21% y mal en el 6%. A su vez, el 71% de las pastillas no precisaban intervención, pero el 23% demandaban una revisión más detallada y el 6% exigían ser sustituidas. En malas condiciones, unos y otras aumentan la distancia de detención, por lo que los expertos recomiendan cambiar pastillas a los 60.000 km y discos a los 80.000 km, siempre que se conduzca de forma tranquila, pues aquellos que practiquen una marcha más exigente o deportiva se verán en la necesidad de sustituirlos antes de esas marcas. Por su parte, el líquido de frenos, para muchos uno de los grandes olvidados, hay que renovarlo cada dos años.

Muchos con las ruedas mal

El estudio también destaca que el 21% de los neumáticos comprobados eran aptos, pero que en el 42% de los coches convenía cambiarlos y que el 37% suponían un peligro. Y eso que son el único punto de contacto con la carretera.

Hay que saber que si están muy desgastados pierden hasta un 80% de adherencia en mojado, con riesgo de sufrir aquaplanning.

A todo ello, una presión baja en las ruedas aumenta el riesgo de reventón un 30%, a la vez que sube el consumo de combustible y reduce la vida útil de la cubierta aproximadamente un 20%.

Por lo demás, recuerda la importancia de sustituir estos decisivos elementos cuando la profundidad de su dibujo sea menor a 3 mm (la ley autoriza un mínimo de 1,6 mm, pero yendo sobre suelo de baja adherencia una rueda con menos de 3 mm equivale a jugársela ante cualquier imprevisto serio). Lo mismo si presentan bollos, bultos o cortes, incluso en los flancos.