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Isuzu D-Max: para llevar cualquier cosa a casi cualquier sitio

Probamos la pick up del fabricante japonés, un vehículo espartano pero solvente y capaz para cualquier tarea

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Un exterior poderoso, un interior algo espartano pero confortable y un motor capaz de cualquier tarea que necesite el usuario más exigente. Así es la D-Max, la pick up del fabricante japonés Isuzu, que acaba de estrenar una nueva versión este 2017.

La D-Max 2017, a la venta desde principios de año, actualiza al modelo que llevaba a la venta desde 2012. Estéticamente, en el exterior se ha rediseñado el frontal y la parte trasera, insertándose nuevas luces LED. En el interior, los cambios se centran en el cuadro de instrumentos, que ha sido renovado y ofrece más información sobre consumos, circulación y los cambios de marcha.

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Disponible en tres cabinas -Regular (sencilla), Extended (ampliada) y Crew (doble)- y cuatro acabados, la D-Max destila poderío desde el primer vistazo.

En ABC hemos probado la versión de doble cabina con acabado Qasar, el más alto de gama, acompañado de un cambio automático de seis relaciones bastante eficaz aunque algo rudo.

El interior es espartano, en la línea con este tipo de vehículos, aunque cómodo y de aspecto sólido y resistente. Además, está bastante bien aislado, lo que no impide que a altas revoluciones el ruido del motor se deje notar.

El motor, por cierto, diésel de 1,9 litros de cilindrada y 164 CV de potencia, es su gran punto fuerte, junto con su gran capacidad de carga (1,1 toneladas en la caja o 3.500 kg de arrastre) y su precio: 38.000 euros la opción tope de gama, con acabado Qasar y cabina Crew, la de mayor tamaño. En esta última cabina, cuyas dimensiones son las de un turismo de tamaño medio, caben holgadamente cinco personas.

Control de tracción y reductora
Control de tracción y reductora

Hay que resaltar sus medidas, en especial el alto, 1780 mm, y el largo, 5295 mm en la versión de doble cabina, que convierten a la D-Max en un vehículo poco práctico para un uso urbano -para el que no está pensado-. También las dificultades que ofrece su conducción para personas de baja estatura, ya que el regulador eléctrico del asiento no permite acercarlo al volante tanto como sería deseable.

Para aventurarse fuera de la carretera, la D-Max incorpora tracción 4x4, que puede conectarse en marcha, así como reductora, útil también frente a cargas muy pesadas. Además, cuenta con asistente de arranque en pendiente y ayuda electrónica de descenso.

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