Juncker avisa de que penalizará a los que no acojan a asilados

El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, amenazó a los países que no cumplan con sus compromisos en materia de acogida de refugiados con ser más estricto con la exigencia de cumplimiento del Pacto de Estabilidad, que obliga a los gobiernos a limitar el déficit público y a hacer recortes en el gasto. En el debate sobre la crisis de los refugiados que se celebró este martes en Estrasburgo, Juncker dijo que las posibilidades financieras de la Comisión se están agotando, que la situación actual le ha llevado «a los confines de sus recursos presupuestarios» y que los Gobiernos no han aportado los fondos que se habían comprometido a poner a disposición para operaciones de acogida.Jean-Claude Juncker

El próximo mes se celebrará en Malta una cumbre con los países africanos para pedirles ayuda en la contención del flujo migratorio, y añadió: «No quiero llegar a La Valleta con promesas incumplidas porque ¿cómo le podríamos pedir a los africanos que cumplan los suyos».

Para convencer a los más reticentes, vinculó directamente la crisis migratoria con la vigilancia de las finanzas. Y lanzó la siguiente advertencia: «El que quiera una interpretación flexible del pacto de estabilidad debe cumplir con sus responsabilidades».

Debate acalorado "Hay países, incluidos los grandes, que no están realizando esfuerzos suficientes"

Los grupos políticos también pidieron que los países cumplan con los acuerdos sobre refuerzo de las fronteras exteriores, la protección de los demandantes y su registro, advirtiendo al mismo tiempo del riesgo de que el debate beneficie a las fuerzas populistas y xenófobas. El portavoz del principal grupo de la cámara (PPE) el alemán Manfred Weber dijo que Europa vive un momento de «egoísmo nacional», con políticos que citó expresamente como la francesa Marine Le Pen o el británico Nigel Farage, que lideran dos grupos de nacionalistas antieuropeos en el Parlamento de Estrasburgo, a los que acusó de «sembrar el miedo entre la población».

El líder de los socialdemócratas, Gianni Pittella, afirmó que la mejor vía para combatir a estos movimientos es «avanzar con propuestas concretas» y con «respuestas valientes y convincentes». Pittella hizo un llamamiento «a todas las fuerzas europeístas» para «poner en el centro nuestro europeísmo porque el reto está entre los que quieren destruir y los que queremos construir».

La «ruta de los Balcanes»

Juncker había reconocido que la situación que vive la UE es «excepcional» y que en la reunión de los países implicados en la llamada «ruta de los Balcanes» que convocó este domingo «no todas las intervenciones favorecían el diálogo» en alusión a las tensiones que se pusieron sobre la mesa. Pese a todo, el presidente de la Comisión se justificó diciendo que «era el momento de arrremangarse» porque la proximidad del invierno va a provocar una situación insostenible para los refugiados. Croacia ha pedido que se ponga en marcha la cláusula de asistencia mutua para que los demás países aporten material concreto para construir campos para los recién llegados.

En cuanto a las negociaciones con Turquía, Juncker dió a entender que los 3.000 millones que se le han ofrecido a Ankara a cambio de su colaboración tienen que salir de las arcas de los países miembros.