Agricultores y regantes se manifiestan en contra del «tarifazo» eléctrico

Unos siete mil agricultores y regantes llegados de toda Andalucía, cifra dada por los convocan tes, se concentraron ayer en la Plaza de España, ante la sede de la Delegación del Gobierno, y se manifestaron con pancartas y burros para rechazar el «tarifazo» eléctrico, la subida del precio de la luz, y exigir un precio que no les obligue a pagar todo el año una potencia que sólo necesitan durante unos meses.

La protesta, sincronizada con otras en el resto de España, contó con la participación de Fenacore, la Federación Nacional de Comunidades de Regantes, que la organizaba, y de Feragua, Areda, Asaja, COAG, UPA y las cooperativas agrupadas en Faeca. El presidente nacional de los regantes, Andrés del Campo, presente en la concentración sevillana, dijo que el importe del «tarifazo» a nivel nacional se calcula en más de 100 millones de euros, de los que 37 son en Andalucía. Los manifestantes pidieron también un IVA reducido, un contrato de temporada flexible y apoyo a la producción de energía renovables para autoconsumo.

La delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, se reunió durante la concentración con la presidenta de Feragua, Margarita Bustamante, y otros representantes de los regantes y agricultores, y se manifestó a favor de un contrato especial para los regantes. Crespo admitió que Andalucía «es una tierra eminentemente agrícola, por lo que se trata de un tema de vital importancia por el que se están produciendo contactos entre agricultores y Gobierno, que tiene muy en cuenta al sector» y se estudia un contrato especial para agricultores por parte de los ministerios de Industria y de Agricultura, proyecto que incluso se ha anunciado en el Congreso Tras reconocer que a los regantes «les preocupa la subida de costes en la agricultura con esta tarifa eléctrica», Crespo se mostró en contra de la «utilización política» de las protestas y afirmó que los costes empezaron a subir a partir de 2008, cuando «se liberalizaron las tarifas eléctricas», pues hasta entonces había un contrato especial para los regantes, algo que se eliminó «y cada año han ido subiendo los costes para los agricultores, porque la tarifa eléctrica es cada vez más costosa».