Visibilidad

El mayor lujo no es vivir sin trabajar sino trabajar sin cobrar. Almudena Cid va a comentar de forma gratuita la gimnasia rítmica en los JJ.OO. para TVE. Se lo ha pedido Paloma del Río, que ha narrado su carrera deportiva, y ha dicho que sí. Porque puede. Es una privilegiada. Su marido, Christian Gálvez, tiene trabajo del de cobrar. Así, ella puede permitirse la visibilidad, que dirían en el Huffington Post. No cobras por escribir pero tienes visibilidad, sostienen en el portal. Lo malo es que llegas con la visibilidad a Iberdrola y no te dejan pagar la luz. Daría igual querer pagar con billetes del Monopoly. También hay otro tipo de visibilidades. La de Urdangarin, que cobra por estar en el exilio. Y de Telefónica, que no parece temer que la gente cabreada se vaya a Vodafone. En Zarzuela lo dejan sin Marivent y, además, el Rey y el Príncipe se bajan el sueldo, solidarios con los otros españoles. Urdangarín podría comentar el balonmano. Pagando.