CARTAS A LA DIRECTORA

Variedad y gusto

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Si la idea del primer ministro italiano, Mario Monti, acerca de la amenaza que para la felicidad y entretenimiento puede suponer el trabajo fijo o estable (que no es sinónimo de ir a pasar el tiempo), se traslada a otros terrenos cotidianos de la vida, podría decirse que abrir la puerta de la nevera con la certeza de encontrar leche, huevos, pescado o verduras es algo aburrido; que saber de antemano que al caer la noche a uno le espera un techo y una cama caliente llega a producir hastío; que salir a la calle sin sentir en el cogote el aliento de la inseguridad es monótono e insulso, carente de estímulos. Cambiar de trabajo, así como enfrentarse a nuevos retos, pueden ser cuestiones atractivas y enriquecedoras para el desarrollo personal y profesional, sin embargo, también hay quien disfruta toda la vida tocando el piano, haciendo muebles o pasteles o pilotando. En la variedad está el gusto, y en la sociedad del bienestar, ¿deberían estar las oportunidades?