Antonio Sanz y Rafael Velasco, el pasado miércoles en el Parlamento. :: EDUARDO ABAD. EFE
ANDALUCÍA

PP e IU restan credibilidad a la propuesta de Griñán de un pacto por la educación

Sanz dice que lo ve «imposible» si hay recortes para ajustar el déficit y Valderas pide al presidente «más hechos y menos palabras»

SEVILLA. Actualizado: Guardar
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Partido Popular e Izquierda Unida restaron ayer credibilidad y manifestaron su desconfianza en la propuesta que el domingo hizo Griñán para que Andalucía alcance un pacto por la educación que conmemorase en 2012 el 30 aniversario de la universalización de la enseñanza. El secretario general del PP andaluz, Antonio Sanz, manifestó que lo ve «imposible» si la Junta recorta partidas educativas para ajustar el déficit, mientras el coordinador de Izquierda Unida, Diego Valderas, pidió al presidente andaluz «más hechos y menos palabras».

Griñán avanzó pocos datos sobre los contenidos de ese deseado pacto. Sólo esbozó que se basaría en una «programación a medio y largo plazo», con un permanente «reciclaje del sistema» y priorizando objetivos que promuevan la cultura del esfuerzo y del trabajo bien hecho.

No es la primera vez que Griñán habla de alcanzar un acuerdo de todos los partidos en materia educativa. Fue el mensaje principal en su discurso de investidura. También el líder del PP, Javier Arenas, ha reiterado que la enseñanza es una prioridad en su alternativa de gobierno.

El pasado mayo Griñán presentó a la comunidad educativa un plan de la Junta con 80 medidas para mejorar la calidad de la enseñanza andaluza. El presidente del PP-A ya anunció el pasado agosto que este mes de septiembre lanzaría una iniciativa para un gran pacto por la educación en Andalucía. El PP ha organizado unas jornadas de esta materia en Sevilla, que hoy clausura el dirigente popular, según anunció ayer Sanz.

Hay razones para la postura de ambos. Esta comunidad se haya con los índices más altos en fracaso escolar y abandono temprano de la enseñanza. No es baladí que en las estadísticas del paro, más del 60% de los andaluces que figuran en ellas carezcan de estudios superiores.

Consenso fracasado

Pero Griñán y Arenas olvidan recordar cada vez que lanzan sus ofertas de pacto que este ya ha fracasado varias veces en Andalucía, como no ha prosperado en el ámbito nacional la iniciativa de Gabilondo. No fue posible el acuerdo de los dos principales partidos en la Ley General de Educación aprobada en 2007. Tampoco hubo pacto en el dictamen sobre la convergencia educativa aprobado la pasada primavera por el Parlamento. Un amplio documento con 130 medidas contra el fracaso escolar que los tres grupos de la Cámara habían elaborado durante meses. Como la ley mencionada, sólo PSOE e IU votaron el dictamen. Los socialistas se quejaron del voto en contra del PP, cuando, según argumentaron, el 80% de sus propuestas se había incluido en el documento.

Tanto la ambiciosa ley como el dictamen se fraguaron antes del tijeretazo impuesto por el déficit. La principal razón que ayer dio Sanz para desconfiar del pacto de Griñán es la sospecha de que Educación también padezca el ajuste presupuestario por el déficit. Sanz recordó que, según el Plan Económico-Financiero de Reequilibrio de la Junta de Andalucía, el Gobierno pretende recortar partidas educativas en 2011 y 2012. En total, 520 millones de euros.

El ejecutivo de Griñán ha desmentido que vaya a haber tijeretazo a las partidas educativas en 2011. El presidente de la Junta se comprometió el domingo a que las políticas educativas serán «la referencia a partir de la cual construyamos todas las cifras del presupuesto». Javier Arenas ha reclamado que se le dedique el 20% del presupuesto de 2011. En el de 2010, se destina 6.363 millones de euros, un 19% de las cuentas (35 .061.129.716).

El vicesecretario general del PSOE, Rafael Velasco, recordó ayer que la propuesta de Griñán es la tercera que hace y pidió a la oposición que «reflexione» sobre ella. Sanz contestó que Arenas lleva cinco años instando a un gran pacto por la educación. El horizonte de un acuerdo se ve aún lejano.