Economia

LOGO ECOLÓGICO

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El pasado 1 de julio entró en vigor la nueva normativa europea que regula el etiquetado de productos ecológicos. El logo que fue seleccionado por votación popular deberá incorporarse a todos los productos envasados obtenidos a partir de agricultura o ganadería orgánica. Además podrán ir acompañados de los indicativos de cada Estado o cualquier otro autorizado. Este logotipo no es obligatorio para los productos de importación o para los que no estén envasados. Se exige que todos los operadores se hayan adaptado a la misma antes del 30 de junio de 2012. A partir de esta fecha no solo deberán incorporar el logotipo sino también el lugar de procedencia del producto envasado y la referencia al organismo de certificación y control. Este nuevo proyecto de promoción del modelo ecológico europeo incluye la puesta en marcha de una campaña de promoción, unas de las acciones que en los últimos años más gusta a la Comisión y en las que se deja sus buenos cuartos.

La agricultura ecológica es un modelo agrario demandado por parte de la sociedad y por tanto una alternativa para nuestro sector agrario y agroalimentario. Sin embargo, en una época complicada para las economías mundiales, en particular para la europea, parece superfluo gastar importantes cantidades de fondos públicos en el desarrollo de proyectos redundantes. No siempre el etiquetado favorece la identificación, ya que un doble indicativo implica mayor esfuerzo de aprendizaje por parte del consumidor, algo que la experiencia ha demostrado que no fácil conseguir y, en cualquier caso, es costoso. Pero sobre todo, se dejan sin resolver los verdaderos problemas del mercado ecológico; asuntos importantes como tener una buena red de distribución y venta, incrementar los niveles de exigencia en seguridad alimentaria para así poder reducir el número de alertas sanitarias, informar de forma clara del nivel de productos de síntesis utilizados en cada uno de los alimentos ecológicos, etc. Son exigencias que deberían ser prioritarias para garantizar la adecuada trazabilidad, la correcta información del consumidor y, de esta forma, consolidar el desarrollo de un sector con un importante potencial dentro de la Unión Europea.