Los Lakers siguen en caída libre pese a Gasol

Los Angeles Lakers, un pozo sin fondo, sufrieron frente a los Charlotte Bobcats su sexta derrota consecutiva, la decimoctava en los últimos 21 partidos, y fueron abucheados por el público del Staples Center, testigo del monólogo del pívot Al Jefferson. Jefferson igualó con 40 puntos su récord de anotación personal y agregó 18 rebotes, mientras que Gerald Henderson añadió 20 tantos.

Pau Gasol sumó su décimo encuentro seguido con al menos 20 puntos y acabó con 24 tantos y 9 rebotes, pero se quedó a un rebote de igualar la mejor racha de partidos en su carrera con al menos 20 puntos y 10 rebotes (seis consecutivos en 2007).

Los Lakers no perdían en casa frente a los Bobcats desde enero de 2009. Esta derrota deja el registro de los Lakers en 3-12 en enero, la primera vez que han perdido esa cifra de partidos en un mes desde 1964.

Los angelinos apostaron desde el comienzo por volcar su ataque sobre Gasol y aprovechar su magnífico estado de forma. El español respondió anotando 8 de los primeros 12 puntos de su equipo mientras sus compañeros se combinaban para una pobre estadística de 1/7 en tiros.

Enfrente encontraban problemas para hacer frente a la velocidad de un viejo conocido, el base Ramon Sessions, y su conexión con el Jefferson, que se dio un festín en su emparejamiento directo con Robert Sacre y abrió el camino para Charlotte en el segundo cuarto (32-44).

La defensa angelina brillaba por su ausencia de forma que su rival veía el aro como una piscina. La intensidad bajo aros de los locales naufragaba por completo y los Bobcats parecían gigantes con imanes en sus manos a la hora de luchar por el rebote.

Sólo el entusiasmo de Nick Young logró reducir momentáneamente la brecha (45-50), ya que el conjunto de Steve Clifford, gracias a un parcial de 0-8, se fue al descanso con la mayor ventaja del partido hasta ese momento (49-62) aprovechando la pasiva actitud de su contrincante, que permitió 34 puntos en la pintura.

Los de Carolina del Norte llegaron a estar 20 puntos arriba (57-77) en el tercer periodo mientras veían el deleznable 1/12 en tiros de los Lakers en unos minutos en los que la figura de Jefferson se agigantaba a cada jugada, imparable para un Gasol limitado en defensa y para unos casi inmóviles Sacre y Jordan Hill.

El esfuerzo de hombres como Jodie Meeks y Manny Harris consiguió dejar el resultado en 74-86 a falta de un cuarto, al que se llegó tras una jugada de cuatro puntos a cargo de Ryan Kelly. Los californianos recuperaron la confianza a última hora (78-86), aunque Jefferson seguía siendo inalcanzable.

Para los Lakers el triple parecía su único recurso disponible y ese hincapié desde la larga distancia les llevó a decir adiós de forma prematura (88-102, m.41). Los de Mike D'Antoni acabaron con 6-26 desde el perímetro y encajaron 64 puntos en la pintura