El chocolate de Cádiz, ejemplo en España

Cuando hace ahora más de una década el gaditano Pedro Álvarez decidió elaborar una serie de recetas de turrones y chocolates para regalárselas a sus amigos, y de paso vender algunas, el 'padre' de Pancracio no imaginaba el alcance de su empresa.

En apenas diez años, la firma Pancracio no sólo se ha convertido en una de las gaditanas de mayor prestigio. Su influencia ha trascendido más allá del universo placentero del cacao. Pedro Álvarez y Pancracio son protagonistas de una campaña de publicidad del banco ING. Sirven de ejemplo, junto a otros emprendedores, de los anuncios publicitarios de un producto del banco naranja.

Álvarez y sus cuidadísimas cajas de chocolates están presentes en las cuñas publicitarias que pueden verse y oírse por televisión, la radio e internet.

Un impacto menor, pero seguro y objetivo, son los tres millones de clientes con los que ING cuenta en España, unos de los bancos con mayor presencia en las redes sociales con 209.000 fans en Facebook y de 17.000 seguidores en Twitter.

Un plus de marketing para esta empresa de chocolates gaditana que se distribuye exclusivamente en puntos de venta muy seleccionados -en numerosas ciudades de España, Nueva York, París y Londres o Tokio, entre otras- y a través de la página web pancracio.com.

La elección de Pancracio, una empresa local, casi familiar, del castigado sur del sur, para protagonizar los anuncios del banco holandés demuestran el poderío de la empresa gaditana que, desde su nacimiento, no ha dejado de crecer. Es idea de Pedro Álvarez, un economista experto en marketing, diseñador gráfico y que se define en la página web de Pancracio como «chocohólico».

Habiendo creado packaging y diseños de productos con gran éxito para otros, y tras su paso por Nueva York, Álvarez decidió crear su propia marca, una cuyo denominador común es la más alta calidad y un diseño cargado de estilo. Desde Cádiz, con una corta plantilla y sólo dos tiendas propias, la central en García Escámez y otra en José del Toro, ha conseguido afianzarse como uno de los fabricantes de chocolate con más prestigio en el mundo de las tiendas 'gourmet' o 'delicatessen', las pensadas para productos exclusivos.

Además, Pancracio se ha especializado en los regalos para empresas con clientes tan exclusivos como Bulgari, Loewe y L'Oreal. El éxito de Pancracio le llevó en 2012 a ser elegida por el Ministerio de Economía como una de las 50 empresas con mayor potencial en España, lo que le supuso presentarse en el Spain Startups Summit ante empresarios, inversores y distribuidores de todo el mundo.