El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, acompañado por el presidente de la Camara de Comercio de Estados Unidos en España Jaime Malet, y el secretario general de la Presidencia del Gobierno, Bernardino Leon durante el encuentro en Nueva York con empresarios estadounidenses con intereses en España./ EFE
crisis económica global

Zapatero afirma en Nueva York que España tiene «el sistema financiero más sólido» del mundo

En una reunión en la Cámara de Comercio de Estados Unidos ha reconocido que los "problemas" de la economía española son el "exceso" del sector inmobiliario y el elevado déficit exterior

NUEVA YORK Actualizado: Guardar
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El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se mantiene firme en su discurso y ha vuelto a afirmar que España "quizá cuenta con el sistema financiero más sólido de la comunidad internacional" por lo que recuperará "pronto" la senda de su crecimiento potencial, gracias, entre otros factores, al saneamiento de sus cuentas públicas.

Zapatero ha destacado la buena salud del sistema financiero español en un acto organizado en Nueva York por la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España, ante directivos de multinacionales y bancos de inversión americanos que emplean en España a cerca de 33.000 personas. Ante ellos, y a pesar de su optimismo sobre las buenas perspectivas de la economía española, ha reconocido también los dos "problemas" del modelo español: el "exceso" del sector inmobiliario y el elevado déficit exterior.

El objetivo: superar a Francia

Remontándose a la etapa anterior a la actual crisis, el presidente del Gobierno ha recordado que España creció una media del 3,7% en los últimos 14 años, hasta convertirse en la octava potencia económica del mundo en función del PIB y lograr una renta per capita anual de 35.000 dólares. "Hemos superado la media europea y a Italia, cosa que deprime mucho al primer ministro (Silvio) Berlusconi; pero nuestro objetivo es superar a Francia en tres o cuatro años, y esto no lo quiere ni oír nuestro amigo (Nicolas) Sarkozy", ha bromeado Rodríguez Zapatero.

Ante los altos directivos de empresas como Pfizer, IBM, Hewlett Packard, Microsoft, Xerox, Boeing, General Dynamics, Philip Morris, Dow Chemical, Google, Merrill Lynch, Bank of America o Citigroup, ha descrito a España como "un país joven, con una visión positiva de sí mismo y de su futuro".

Entre las debilidades del modelo español ha destacado la gran expansión del sector inmobiliario de los últimos años. "Tenemos un sector inmobiliario fuerte que ha sufrido un frenazo, y, sin embargo, no tenemos hipotecas 'subprime'", ha recalcado Zapatero en relación a las hipotecas de alto riesgo consideradas como uno de los factores desencadenantes de la actual crisis financiera mundial.

Elogios al Banco de España

Entre los puntos fuertes ha mencionado la solidez del sistema financiero, que Rodríguez Zapatero vincula a que España cuenta con un sistema de supervisión de calidad. Tras señalar que el sistema español cuenta con los mejores datos de eficiencia y rentabilidad y con niveles de solvencia y provisión muy elevados, "superiores a los de cualquier sistema financiero", ha elogiado al Banco de España, que ha ejercido su control sobre la banca "con rigor y con una exigencia superior a la de cualquier otro banco central" y así se ha impedido la proliferación de hipotecas de baja calidad.

Como otros puntos fuertes de la economía española Rodríguez Zapatero ha destacado las cuentas públicas saneadas, que han permitido "una continua bajada de la presión fiscal", el proceso de internacionalización de las empresas, la "poderosísima" inversión pública en infraestructuras y el diálogo social. "Tenemos los sindicatos más comprometidos con las reformas de todos los países europeos" ha espetado Zapatero.

La importancia del apoyo a las familias

El jefe del Ejecutivo ha repasado también las "medidas prudentes" que su Gobierno ha adoptado ante la crisis, para apoyar a las familias con deducciones fiscales y facilitar liquidez a las empresas. Entre sus objetivos ha nombrado agilizar las reformas estructurales para mejorar la competencia y fomentar la productividad.

Además, ha avanzado que incrementará la presencia del sector privado en el transporte de mercancías y en la gestión de los aeropuertos y los puertos, y que liberalizará "al máximo" los servicios para acabar con las trabas burocráticas y "los residuos corporativistas".

En ese contexto, se ha mostrado convencido de que se recuperará pronto el potencial de crecimiento económico, situado en torno al 3%, y se ha comprometido a aprovechar la solvencia del sistema financiero y de las cuentas públicas para profundizar en las reformas estructurales necesarias.