La contaminación dispara las ventas de máscaras, purificadores y preservativos en China

Con Pekín en alerta roja por la contaminación, se han disparado las ventas de mascarillas y purificadores de aire, como suele ser habitual cada vez que la polución repunta en la capital china. Pero a dichas compras habituales se ha sumado un tercer artículo de primera necesidad para, como recomiendan las autoridades, pasar estos días en casa y sin salir a la calle: los preservativos.

Según informa el periódico oficial «China Daily», «en Pekín y otras ciudades del norte del país duramente castigadas por la contaminación, el aumento en las ventas de preservativos fue mayor que en los lugares con un aire más limpio». Así lo demuestran las búsquedas en Taobao, un popular portal de compras por internet, de la semana pasada, cuando la polución alcanzó su pico máximo del año.

Sin embargo, el citado diario aclara que este incremento del uso de anticonceptivos no se debe, como antes cuando no había televisión, al aburrimiento por quedarse encerrado en casa debido a la mala calidad del aire, sino a «la preocupación de las parejas por encontrar un buen momento de fertilidad, evitando así el embarazo en días contaminados».

Cierto o no, poco más se puede hacer durante estos días grises en los que la niebla provocada por la contaminación eclipsa el sol y es mejor quedarse en casita a salvo de las nocivas partículas PM 2,5, tan diminutas que se cuelen en los pulmones y pueden provocar cáncer. Junto al incremento de los pedidos «online» de preservativos, destaca un aumento en las ventas de antidepresivos y medicamentos contra la ansiedad, ya que la nube de polución se traga los colores y envuelve a las ciudades en un ambiente realmente fantasmagórico, casi apocalíptico.

Para protegerse contra sus peligrosos efectos sobre la salud, se han disparado también las compras de mascarillas y purificadores de aire, cuyas búsquedas en Taobao han subido un 141,5 y un 50,0 por ciento con respecto a los últimos treinta días, a tenor del diario «The Wall Street Journal». Entre el 30 de noviembre y el pasado día 6, cuando se extendió la capa de contaminación por el norte de China, los internautas chinos buscaron en más de 600.000 ocasiones mascarillas en dicha página web de comercio electrónico, lo que supone un incremento del 41,1 por ciento con respecto al mes anterior.

Purificadores de aire

De igual modo, las búsquedas de purificadores de aire para el hogar aumentaron en las dos ciudades más castigadas por la contaminación: Pekín y Shenyang, capital de la provincia nororiental de Liaoning.

«Ahora mismo se han agotado todos los purificadores y hay que esperar varios días», advierte una vendedora en la tienda especializada Torana, ubicada en un elitista complejo residencial del centro financiero de Pekín. A pesar del elevado precio de sus aparatos, que son de la marca sueca Blue Air y cuestan entre 3.590 y 25.800 yuanes (entre 510 y 3.666 euros), sus existencias se han agotado rápidamente tras el pico de polución alcanzado la semana pasada y la alerta roja declarada el lunes por la noche, que en principio será levantada este jueves al mediodía.

Mucho más económicos, los purificadores de la marca china Xiaomi, líder en teléfonos móviles en este país, han disparado también sus ventas en Taobao, donde valen 899 yuanes (127 euros). Frente a los 129 encargados el domingo, los internautas pidieron 422 el lunes. Tal avalancha hizo que se agotaran los filtros que necesitan dichas máquinas, de las que solo se vendieron 68 el martes, cuando empezó la lista de espera para suministrar nuevas compras.

Tras registrar desde el lunes unos niveles de contaminación de 350 microgramos por metro cúbico de partículas PM 2,5, la alerta roja será levantada en Pekín hoy, siempre y cuando los meteorólogos acierten y lleguen las lluvias previstas a partir del mediodía, que limpiarán el ambiente. Hasta que vuelva la polución, que se dispara en invierno por el carbón de las calderas de calefacción y de las centrales térmicas que producen electricidad, los chinos ya se preparan ante una nueva alerta abasteciéndose de mascarillas, purificadores y preservativos. Todo con tal de protegerse contra la contaminación... y sus efectos.