La matanza de estos animales se remonta a los vikingos
La matanza de estos animales se remonta a los vikingos - FLikr ladyLara (Laura Bâlc)

Críticas al gobierno de Dinamarca por impedir la entrada de activistas en las Feroe

El grupo ecologista Sea Shepherd quería interrumpir la tradicional matanza de calderones, unas ballenas pequeñas parecidas a los delfines, que se remonta a los vikingos

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El gobierno autónomo de las Islas Feroe impidió esta semana la entrada en sus aguas territoriales al barco Bob Baker en el que viajaban 21 activistas de la organización de defensa de los animales Sea Shepherd. Desde hace varios años, la tradicional matanza de calderones, conocida como Grindadráp, que se produce entre los meses de julio y septiembre, provoca numerosas críticas de organizaciones de defensa de los animales.

Defendida por el gobierno local como una tradición secular que se remonta a la época de los vikingos y que forma parte de la utilización de recursos marinos para la subsistencia de la población, los defensores de los animales consideran que se trata de una práctica cruel que ha dejado de tener sentido, ya que la carne de estos cetáceos apenas es apta para el consumo por los elevados niveles de mercurio que contiene.

Tan solo se recomienda su ingesta una vez al mes y se desaconseja a las mujeres embarazadas y jóvenes.

Alrededor de las Feroe vive una población de 100.000 calderones, conocidos también con el nombre de ballenas piloto de aleta larga. Los barcos de los activistas tratan de evitar que las manadas de calderones se acerquen a las aguas de las Feroe, ya que, una vez avistados, son rodeados por barcas de los habitantes locales y conducidos a bahías poco profundas donde se produce la masacre. Alrededor de ochocientos de estos animales mueren cada año con un método en el que se utilizan unos cuchillos conocidos como monustingari que seccionan su espina dorsal. En las matanzas tan solo participan hombres que, posteriormente, reparten la carne y la grasa de sus presas.

Los activistas cuestionan, además, la actitud del gobierno danés que permite estas masacres en sus aguas. «Al prohibir a la tripulación de Bob Baker el acceso a las islas Feroe, las autoridades danesas demuestran que tienen más interés en apoyar la matanza de calderones que en sus responsabilidades con la Unión Europea». De hecho, dos compañías alemanas de cruceros anunciaron el pasado mes de agosto que cancelaban todos sus viajes a las Feroe en protesta por esta actividad.

Las Feroe son un archipiélago compuesto por 18 islas con una superficie de 1.400 kilómetros cuadrados y una población de 48.000 personas. Es una región autónoma del reino de Dinamarca, aunque su territorio no forma parte de la Unión Europea. Sus principales recursos son la pesca y el turismo.

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