Bronca en el pleno de El Puerto: «Me dijo hasta en tres ocasiones que me iba a reventar la cabeza»

El concejal del PP Javier Bello relata cómo ocurrió el altercado y asegura que «nadie» agredió al edil del PSOE

Violenta bronca en el pleno de El Puerto: «Te reviento la cabeza, niñato»

Momento del altercado en el pleno de El Puerto.

M. Almagro

El Puerto

«Me he visto envuelto en una situación vergonzosa pero ni miento ni soy y he sido en mi vida violento con nadie». El portavoz y concejal del Partido Popular en El Puerto, Javier Bello, lleva ya casi 48 horas dándole vueltas con cierta «incredulidad» a lo ocurrido en el último pleno celebrado en la ciudad en el que varios ediles y cargos de confianza se vieron involucrados en una bronca que ha tenido una enorme difusión por el violento cariz que tomó dicho altercado y que obligó a suspender el plenario. Unas imágenes que han transcendido a todo el país.

El concejal, que ha sido uno de los denunciados por David de la Encina ante la Policía Nacional, niega que éste sufriera ningún tipo de agresión, como también sostiene. «No sé a qué momento se refiere con el codazo pero nadie lo roza. No hay manera posible de que a ese hombre se le diera un codazo. Todo está grabado y esa es la prueba más fehaciente. Podemos comprobarlo en el vídeo. No se ve nada de eso. No hay más. Que quiera ahora usarlo como excusa por lo que me dijo, allá él», explica a este periódico.

Y lo que le espetó, como asegura Bello, y que quedó grabado por un micro abierto fue: 'Te voy a reventar la cabeza, niñato'. «Me lo dijo hasta en tres ocasiones», afirma el concejal del PP. Y recuerda lo ocurrido: «Este hombre estaba muy nervioso. Llegó un momento en el pleno que decidió que tenía que liarla y perdió los papeles. Se suspendió y cuando nos estamos yendo empezó a decirme: '¿dónde vas cobarde?'. Entonces, al pararme delante, me dijo: 'que te pasa, ¿me vas a pegar?'. Yo le dije que no le iba a pegar. En ese momento, vino Jesús (cargo de confianza) y me dijo que me fuera de allí y fue ahí cuando empezó a decirme que me iba a reventar la cabeza hasta en tres ocasiones y que era un niñato», recuerda. «A mí no me ha hecho falta sacar una nota de prensa porque el vídeo habla por sí solo», añade.

E insiste: «Yo solo me estuve quieto y levanté las manos, ni siquiera iba a defenderme. Es una vergüenza a la situación a la que nos llevó el señor De la Encina. Atenta contra la integridad», afirma.

Por ello cree: «Tiene que dimitir y pedirme disculpas. Como veo que no es valiente ni para dimitir se lo he solicitado a su presidente provincial Ruiz Boix y al regional, Espadas, que lo expulsen del partido. El Puerto no se merece tener un miembro en la Corporación que actúe así».

En cuanto a las acusaciones vertidas contra él y su partido sobre que están mintiendo en cuanto a la publicidad institucional, origen de la discusión, Javier Bello mantiene que dicen la verdad. «Yo no miento. Y tenemos los papeles que así lo acreditan y lo puedo demostrar. Por un lado está el vídeo y por otro las facturas en el portal de transparencia. Soy el portavoz del gobierno de la ciudad, soy vehemente en defender las posturas y la ideología pero nunca he insultado a nadie ni privada ni públicamente, ni soy violento con nadie», insiste.

Al respecto de la ya famosa calificación de 'niñatos', se le pregunta si lo son: «Somos un gobierno conformado por un alcalde, un teniente de alcalde y un cargo de confianza jóvenes pero la ciudadanía nos eligió de forma democrática. Quizá les moleste que haya personas jóvenes que vengamos a mejorar a El Puerto y que lo estemos consiguiendo», se defiende.

Y concluye su valoración sobre tan comentado episodio y, en concreto, sobre la frase que el concejal socialista pronunció en medio del incidente('esto nos viene bien') : «Me ha recordado a cuando Zapatero le dijo a Gabilondo que había que crear tensión. Lo hizo de manera premeditada y con una intencionalidad, quería crear un conflicto para ponerse en la picota pero ha sido torpe. Quería darse a valer ante un PSOE que no lo nombra candidato y lo que le pasa es que cada vez está mas nervioso. Pero lo peor es que no se arrepiente. Por el bien de sus siglas, por él mismo y por el mal que está causando a la ciudad debería de irse».

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