El valor de la docencia

Quiero felicitarle muy sinceramente por los contenidos de su tribuna titulada Fin de curso y vísperas de nota. De la misma forma, deseo transmitirle un agradecimiento que es de lo más plural, puesto que lo hago, en primer lugar en mi nombre, como docente que soy; pero, mucho más, y como delegado provincial de la Consejería de Educación, en representación del amplio colectivo de maestros y maestras, de profesores y profesoras. En su artículo, usted realiza un reconocimiento del valor de la función del docente que, en los tiempos que corren, se hace más que necesario y por ello se agradece de manera especial. Pero no es sólo eso. También alienta a estos profesionales ante el posible agotamiento o desánimo, aspecto que a usted no se le escapa. Por ello, puede abordar la dificultades que han ido rodeando a esta profesión. Igualmente, de sus palabras se desprende su propio agradecimiento a profesores concretos, en los que valora su preocupación porque su trabajo educativo vaya más allá de la mera transmisión de conocimientos. Porque, quizás ese trascender de los conocimientos sea, además de una realidad, una cualidad de los docentes actuales que tal vez no se valora en su justa medida. El profesional de la docencia de hoy, en cualquiera de sus niveles, se encuentra emplazado a actuar de manera efectiva en la educación integral de sus alumnos. Ese sentimiento lo comparten muchos padres y madres.

Manuel Brenes Rivas. Delegado provincial de Cádiz. Consejería de Educación . Junta de Andalucía