Guillermo Pérez Villalta. / LA VOZ
Cultura

El tarifeño Guillermo Pérez Villalta exhibe en Sevilla su faceta más heterogénea como 'Artífice' de tapices, joyas y maquetas

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El pintor tarifeño Guillermo Pérez Villalta, uno de los máximos exponentes de la figuración madrileña de los 80 y uno de los artistas más representativos del posmodernismo español, exhibe en Sevilla su faceta menos conocida como diseñador de joyas, confeccionador de tapices y constructor de maquetas y bocetos. Con Artífice, que permanecerá abierta hasta el 30 de julio en las salas de la Caja San Fernando de la plaza de San Francisco y la calle Imagen de la capital andaluza, Pérez Villalta presenta la versión más heterogénea de su creación.

A pesar de que el prestigio de Pérez Villalta (Tarifa, 1948) se debe a su producción pictórica, en Artífice -que llegará al Museo Provincial de Cádiz el próximo mes de noviembre- no se incluye ni un solo cuadro, que en esta ocasión ceden su protagonismo a objetos, como un pisapapeles o una jarra de aceite y tapices que se conservan en la Real Fábrica.

El Premio Nacional de Artes Plásticas de 1985 incluye el concepto del ritual a través de maquetas de pequeños templos, una idea arquitectónica, íntimamente relacionada con lo religioso, que también está presente en las joyas que diseña. El título de la muestra se percibe también en los bocetos que el autor ha elaborado de edificios como la antigua Cámara de Comercio de Gibraltar. Pérez Villalta comenzó los estudios de Arquitectura, una disciplina que ha influido toda su obra pictórica y que se percibe claramente en esta exposición.

Sus cuadros, de fuerte colorido y luminosidad, representan personajes que se mueven dentro de complejas escenografías teatrales, que aúnan los interiores con los exteriores. En su etapa más reciente, ha incluido la temática mitológica, con fuerte contenido simbólico. Frente a los valores que defiende la modernidad abstraccionista (autenticidad de los materiales y pureza formal), la obra de Villalta es de naturaleza totalmente narrativa, que se aprecia en creaciones como Natural (1987).